El campus público de la Universidad de Valladolid (UVa) 'María Zambrano' alcanzará los 2.500 alumnos en el curso 2023/2024 cuando comiencen los estudios de los nuevos grados de Comunicación Digital y Enfermería.
Después de haber terminado este curso celebrando ocho ceremonias de graduación con participación de 477 estudiantes y la asistencia de 1.500 familiares, con un total de 2.400 alumnos matriculados, en las previsiones se contempla llegar a 275 profesores y unos 60 miembros del Personal de Administración y servicios (PAS), según ha afirmado a este periódico el vicerrector Agustín García Matilla.
El desarrollo del campus vendrá marcado, también en 2023, por la apertura del nuevo polideportivo en el solar que ha quedado entre las calles de Coronel Rexach y Caño Grande, para el que existe una partida de 300.000 euros, que se prevé ampliar el próximo año.
Aprobado en el último Consejo de Gobierno de la UVa como apuesta estratégica, el Grado en Comunicación Digital se centra en proporcionar a los estudiantes las competencias que les permitan desarrollarse como comunicadores socialmente responsables en el entorno digital, desde una perspectiva integral: teórica, práctica y ética; y más allá de la dimensión puramente tecnológica que siendo esencial, se entiende aquí de manera instrumental, según García Matilla.
Ello permitiría a los titulados, bien incorporarse a entidades diversas –empresas de producción audiovisual y transmedia, instituciones públicas u ONG,s–, que demandan este tipo de profesionales, o idear y desarrollar proyectos propios de emprendimiento comunicacional sostenible, para el que el grado serviría de lanzadera.
El vicerrector ha destacado que este nuevo grado ha sido presentado por la Facultad de Ciencias Sociales, Jurídicas y de la Comunicación, por iniciativa del nuevo Departamento de Comunicación Audiovisual y Publicidad, con la participación de 10 departamentos de la UVa y la colaboración de profesorado de los otros dos centros del campus: la Facultad de Educación y Escuela de Ingeniería Informática.
Se pretende que en un primer año puedan entrar unos 60 estudiantes. El Máster de Comunicación con Fines Sociales y la titulación de Publicidad y Relaciones Públicas, «que tiene un sesgo muy marcado a lo que puede ser el concepto del filósofo y sociólogo Habermas de lo que sería qué tenemos que publicitar en el siglo XXI y, por lo tanto, lo que queremos es estar en vanguardia de una comunicación innovadora dentro del contexto digital», matiza García Matilla.
El vicerrector ha añadido que, con las nuevas titulaciones, el campus «adquiere un coherente nivel de especialización con la posibilidad de que los estudios de Enfermería –igualmente con 60 plazas para el primer año– también puedan tener una vocación de orientación sanitaria para el conjunto de la sociedad, promoviendo una buena comunicación en Ciencias de la Salud».
El vicerrector del 'María Zambrano' ha recordado que la Facultad de Ciencias Sociales, Jurídicas y de la Comunicación, cuenta con unas instalaciones de primer nivel con dos platós, uno de vídeo y otro de fotografía, dos estudios de sonido, para radio y grabación de música respectivamente, dos salas de producción para píldoras audiovisuales y cuatro cabinas de edición de vídeo.
«Éstas son las más recientes instalaciones equipadas para que comiencen a funcionar ya desde el próximo curso 2022/23», ha matizado. García Matilla destaca que El campus despierta la admiración de quienes los visitan: profesorado de otras universidades que asisten a los tribunales de tesis doctorales y selección de profesorado, representantes de instituciones o familiares.
En cuanto al proyecto del Gobierno de modificar las pruebas de selectividad, el vicerrector afirma que la intención de reducir exámenes «es buena al igual que lo que significa limitar el peso de un aprendizaje meramente memorístico; en lo que respecta a la prueba de madurez que se pretende incorporar, lo que hay que hacer es adecuar las metodologías docentes para que en lugar de unas pruebas fragmentadas, el alumno sepa responder interrelacionando conocimientos (...) si no se cambia la forma de enseñar los contenidos conceptuales, de nada servirá cambiar el formato de la EBAU».
Asimismo apuesta por diseñar una prueba en la que todas las autonomías cuenten con un modelo equiparable para que no haya agravios comparativos.