El fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, ha reivindicado este martes en el Senado, en su primera comparecencia en las Cortes Generales tras su imputación en el Tribunal Supremo (TS), que "las noticias o la información que tergiversan la realidad son un auténtico problema para la democracia".
Así se ha pronunciado en el marco de la Comisión de Justicia del Senado, a la que ha asistido para presentar la Memoria anual de la Fiscalía referida a 2023. Es la primera vez que acude a las Cortes Generales desde que su imputación por un presunto delito de revelación de secretos contra Alberto González Amador, novio de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
García Ortiz ha aprovechado su intervención, antes de desglosar los datos de la Memoria anual, para señalar que las nuevas formas de comunicación, las vías de acceso a la información y la gestión de los datos "han aumentado exponencialmente los peligros a los que una sociedad puede verse sometida si los mecanismos de control no se gestionan adecuadamente".
El fiscal general ha incidido en que dichos peligros pueden "poner en riesgo nuestras democracias, tal y como ha reconocido el Parlamento Europeo". En este punto, ha hecho referencia al Eurobarómetro, que apunta que el 81% de los ciudadanos de la Unión Europea está de acuerdo en que "las noticias o la información que tergiversan la realidad son un auténtico problema para la democracia".
Con todo, ha asegurado que "frente a determinados discursos que pretenden socavar nuestras instituciones" y "nuestra propia convivencia", el sistema "resiste". "Nuestro Estado Social y Democrático de Derecho resiste", ha recalcado.
En referencia a dicha resistencia, ha añadido que "el Ministerio Fiscal, los hombres y las mujeres que lo integran, siempre estarán, siempre contribuirán con su trabajo y dedicación, a la garantía y la protección de los derechos de todas las personas, sin distinción y desde el respeto al ordenamiento jurídico".
"La ciudadanía debe conocer que el Ministerio Fiscal ha actuado, actúa y actuará, porque así debe hacerlo, de forma imparcial y sometido únicamente al imperio de la ley", ha manifestado, al tiempo que ha asegurado ser consciente de que los españoles esperan de la Fiscalía "un trabajo serio y responsable".
En este sentido, ha incidido en que la ciudadanía espera también un "esfuerzo colectivo que exige una justicia garantista, efectiva, eficaz, pronta e igual para todos y todas, no la justicia de los salones de los palacios, sino la que demanda una sociedad democrática y plena en el ejercicio de sus derechos".
Destaca la labor de la Fiscalía
Al hablar de justicia, García Ortiz ha asegurado que esta va "intrínsecamente unida" a la "seguridad jurídica" y ha insistido en que "el derecho ha de ser acorde con una interpretación racional y uniforme de la norma".
Al hilo, ha manifestado que la "predictibilidad" es "un presupuesto del ejercicio de los derechos y del deseable funcionamiento y discurrir del tráfico jurídico". "Un espacio de justicia predecible es una garantía para la ciudadanía en el ejercicio y protección de sus derechos, pero también para la Administración pública, para las empresas y para todos los operadores jurídicos", ha apuntado.
En este sentido, el fiscal general ha asegurado que "ante el riesgo de dispersión interpretativa" se debe "poner en valor la encomiable labor que realiza la Fiscalía en la unificación de la interpretación del ordenamiento jurídico" para la "aplicación igualitaria de la ley, a la espera de la labor unificadora que le corresponde al Tribunal Supremo".
Con todo, ha indicado que "la igualdad, la justicia y la seguridad jurídica son presupuestos de un Estado de Derecho" y de "valores" que a las instituciones, incluida la Fiscalía, les corresponde "preservar".
Por último, ha aseverado que la Fiscalía está "siempre abierta a cambios y a asumir nuevos retos para mejorar la eficacia de la justicia y la prestación del mejor servicio público, en una fascinante y compleja España, plural y democrática".