Tanto el Gobierno local del Ayuntamiento de Segovia como los hosteleros sabían que, más temprano que tarde, una vez gripalizada la estrategia sanitaria anticovid, sin restricciones de aforos ni distancias de ningún tipo desde hace tiempo, llegaría el momento de replegar las terrazas que han ocupado espacios públicos por encima de los límites permitidos en condiciones normales durante los tres últimos años. Sin embargo, lo que no era tan previsible es que hubiera bares que se encontraran sin opción de poner nada, cuando antes de la pandemia sí podían, tal y como está sucediendo ahora. Se les deniegan las peticiones por ocupar plazas de aparcamiento, fundamentalmente; aunque lo cierto es que, antes de 2020, también lo hacían sin que se les plantease entonces ninguna objeción, pagando las tasas preceptivas y sin objeciones, ya que era la única manera en que podían disponer de negocio en el exterior, al no tener suficiente acera.
La diferencia está en que, durante estos últimos años, se han llegado a contabilizar hasta 25 establecimientos hosteleros con terrazas ocupando plazas de aparcamiento (más de 50), y ahora se rechazan todas: las excepciones de antes de 2020 y las específicas de la pandemia, que en algunos casos también disponían de espacio en acera.
«No hay derecho a que se estén negando terrazas que se venían concediendo desde hace diez y doce años y que además se denieguen con excusas peregrinas», afirma a El Día el presidente de la patronal hostelera Hotuse,Jesús Castellanos, que defiende los intereses de varios de los afectados. «No estamos hablando de grandes bares y restaurantes céntricos que facturan mucho, sino que la mayoría son pequeños negocios repartidos por distintos barrios, para los cuales las terrazas son fundamentales para su supervivencia», asegura.
¿POR QUÉ SE DENIEGAN? En escritos de denegación de alegaciones a algunos de estos hosteleros, el Ayuntamiento alude al «criterio general» de que «no se deben autorizar ocupaciones de vía pública para terrazas que ocupen plazas de aparcamiento» debido a varias circunstancias: «Existe un déficit importante de plazas de aparcamiento en la mayoría de barrios»; «ese espacio está destinado para el uso de estacionamiento y la instalación de terrazas, a nuestro criterio (de Policía Local), no justifica el cambio de uso para obtener un beneficio particular»; «los dueños de vehículos pagan un impuesto para la circulación y estacionamiento de sus vehículos en vías urbanas»; y que «el Defensor del Común de Castilla y León ha dado instrucciones a los ayuntamientos para restablecer las concesiones de terrazas a la situación anterior a la pandemia».
El presidente de Hotuse, mientras, aparte de recordar que «los hosteleros también pagan impuestos», defiende que «hay que dar una solución». Pretende «que el concejal responsable (el del área de Servicios, Miguel Merino) vea las caras de las personas afectadas, porque tiene que entender la gravedad del problema que se les está causando», continúa. Y este lunes tendrán una reunión con el edil dispuesto a escuchar y «aclarar dudas», según señala él mismo El Día: «Hasta ahora hemos intentado aplicar la normativa de manera general, y también siguiendo las indicaciones que ya dio en octubre el Procurador del Común», explica, «y nuestra vuelta a la normalidad siempre hemos trasladado tanto a Hotuse como a Festur (la agrupación hostelera y turística de la patronal FES) que debía ser con encaje en la normativa vigente». No obstante, matiza que «ahora se trata de valorar caso por caso, por si se diera la opción, por ejemplo, de solicitar permiso a un inmueble colindante que permita utilizar su fachada», pensando en los casos de bares que no pueden poner terraza por carecer de acera suficiente junto al negocio, a menos que ocupen aparcamiento o corten el paso. «Y no podemos olvidar que también hay vecinos que se quejan de las terrazas», advierte el concejal.
BAJÓN DE TERRAZAS. Las cifras oficiales facilitadas a El Día por el Ayuntamiento revelan que para esta campaña, se han recibido 155 solicitudes de terrazas, una cifra alta en comparación con las que se instalaban antes de la pandemia, cuando eran en torno a 120, pero nada que ver con las más de 200 que llegaron a extenderse por la ciudad durante la pandemia (hasta 220 en 2020). Asimismo, de las 155 solicitudes registradas,Merino precisa que 15 se han denegado total o parcialmente por ocupar plazas de aparcamiento: cinco que salvarán una parte de su terraza por tener hueco en acera y diez que, en teoría, ya no van a poder poner nada, una vez se considere firme la denegación. A menos que este lunes encuentren soluciones.