El Consejo de Colegios de Enfermería de Castilla y León advirtió de que 2.169 profesionales de esta especialidad tienen ya 60 o más años, por lo que se jubilarán en los próximos años sin que esté garantizado el reemplazo. Además, con el grupo de 65 años o más, se prevé el retiro de 360 profesionales de enfermería de manera inminente, por lo que exigió medidas urgentes a las administraciones públicas. Según los datos recopilados por el consejo autonómico y el Colegio General de Enfermería de España, en los próximos diez años pondrán fin a su vida laboral en todo el país 49.791 enfermeras, el 16,9 por ciento de las profesionales en activo. Respecto a Castilla y León, el estudio indica que 360 profesionales colegiados se jubilarán próximamente, cifra que podría elevarse en los próximos años hasta los 2.169 si se consideran todas las cohortes de edad que han superado los 60 años.

«Nos encontramos en una situación alarmante que pone en riesgo la calidad asistencial en hospitales y centros de salud. Es imprescindible que las autoridades tomen medidas urgentes para garantizar el reemplazo generacional», advirtió el presidente del Consejo, Enrique Ruiz. «Si no se toman medidas urgentes vamos a tener serios problemas para conservar un sistema sostenible y poder seguir brindando la mejor atención posible», añadió.

Por provincias, la organización considera que los datos reflejan «una situación preocupante» en todas, siendo Valladolid (429) la que registra mayor número en edades de jubilación, seguida de Burgos (355), León (341) y Salamanca (315), Zamora (183), Palencia (155), Segovia (138), Ávila (131) y Soria (122).

Por ello, el Consejo de Colegios de Enfermería de Castilla y León reclamó a la Junta que planifique con urgencia una estrategia para hacer frente a esta crisis. «El envejecimiento de la población incrementará la demanda de cuidados, y sin suficientes enfermeras, la atención sanitaria se verá gravemente afectada», sentenció el presidente.