"Casa o chalet independiente en venta en Vía Roma, 23". Así  se  anuncia en el portal inmobiliario Idealista la salida al mercado, con un precio de tres millones de euros, del solar de la antigua fábrica de loza del barrio de San Lorenzo, en el margen derecho de la citada avenida en dirección al Acueducto.

Precisamente, el anuncio destaca que se encuentra a 500 metros del monumento romano, y hace referencia a la existencia de un convenio urbanístico, incluido en el Plan Especial de Áreas Históricas de Segovia (PEAHIS), que permite el uso residencial del suelo, compatible con uso terciario y una edificabilidad de 4.200 metros cuadrados sobre rasante, con altura 10,50 metros en las fachadas a Vía Roma y a la calle de los Vargas, mientras que en la parte posterior, de  cara al río Eresma, aprovechando el desnivel, están permitidas otras dos  plantas bajo rasantes, también con uso residencial.

De cara a los posibles compradores, además de destacar la cercanía al centro de la ciudad, concretamente al Acueducto, el anuncio indica que San Lorenzo es un barrio residencial y el más cercano al Campus de Santa Cruz de IE University, con «numerosos estudiantes nacionales e internacionales».

El convenio urbanístico firmado entre el Ayuntamiento de Segovia, entonces representado por Clara Luquero como alcaldesa de la ciudad, y la propiedad, representada por Moisés López Díez, establece un total de 1.124,14 metros cuadrados de suelo privado que integran dos fincas de  una sola parcela catastral, con una edificabilidad permitida de 4.200 metros cuadrados. En el documento figura la posibilidad de construir hasta 47 viviendas pero el número máximo de plantas establecido es de planta baja más dos a las rasantes de la avenida de Vía Roma y de la calle de los Vargas.

Zona verde para la ciudad. El Ayuntamiento recibirá para viario público 128 metros cuadrados del solar por un lado, que se suman a otros 2.756 metros cuadrados de otra finca con cara tanto a la calle  de Luis Sancho Cantalejo como a Vía Roma, un espacio libre público de cesión gratuita a la ciudad que el consistorio segoviano habilitará como jardín de acceso libre a su costa.

La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Segovia aprobó en mayo de 2022 la aceptación de la cesión de estos terrenos al Ayuntamiento de Segovia en los términos previstos en este convenio urbanístico para su incorporación al cinturón verde de la ciudad.

Se trata del espacio situado en la parte de atrás de la Escuela Municipal 'La Senda' y, tras esa aceptación de los terrenos, estaba previsto su inscripción a nombre del Ayuntamiento en el registro de la propiedad correspondiente.

El anterior gobierno municipal de PSOE-IU preveía la ejecución en este espacio de un parque público o zona verde para su uso por la ciudadanía, así como la instalación de una pista deportiva, una de las demandas del movimiento vecinal del barrio, proyecto que no llegó a ejecutarse.

Por otro lado, en virtud del convenio, la propiedad de los terrenos entregará al Ayuntamiento un 10% del incremento del aprovechamiento de los terrenos, el equivalente en efectivo de 284,85 metros cuadrados de edificabilidad residencial.

Melitón Martín y los Gil Vargas. La Fábrica de Loza 'La Segoviana' fue fundada en 1861 por Melitón Martín y «agrandada, mejorada y perfeccionada» desde 1875, año en el que fue vendida, por los hermanos Vargas y sus sucesores (Gil Vargas), según recoge Mariano Sáez en su libro sobre las calles de Segovia de 1918.

Está situada junto al Puente de la Loza, sobre el Eresma, en la actual avenida Vía Roma, antes carretera de Boceguillas.

Melitón Martín fue un empresario político liberal del siglo XIX, que estuvo exiliado varios años en Inglaterra y a su regreso a España se puso al frente de varios proyectos industriales en Madrid.

En la fábrica de loza de Segovia trabajaban decenas de personas y todavía en 1978 contaba con una plantilla de casi dos centenares.

Desde finales del XIX, el ceramista Daniel Zuloaga trabajó como director artístico de esta fábrica.