La Gimnástica Segoviana consiguió por fin ganar fuera de casa en un partido épico y en el campo de un duro rival, el Cacereño. Ramsés Gil no escatimó a la hora de elegir a los mejores hombres disponibles para enfrentarse a un equipo extremeño que tenía ganas de acabar con el maleficio que arrastraba en los partidos en casa.
Los de fuera presionaban la salida del balón ante la defensa de tres centrales de los locales, con los extremos abiertos. Por parte de los de blanco, destacó la posición de Astray en la derecha, como extremo. La primera llegada cacereña fue desbaratada por un fuera de juego en unos primeros instantes de partido en lo que los de casa tenían la posesión.
No tardó en llegar el 0-1. Silva, por la derecha, se inventó un pase en el área, que acabó en el remate de Javi Borrego a la segunda con la izquierda. Era el minuto 8. Pero no hubo tiempo para las celebraciones, ya que nada más sacar de centro un trallazo por la escuadra de Iván Fernández dejó tocados a los gimnásticos. Un par de errores defensivos, de Chupo y Carmona, pusieron los corazones gimnásticos en un puño. Pero pronto se rehicieron en buena medida gracias a un Hugo Díaz totalmente recuperado.
Y tras este arreón, en otro ataque visitante Chupo disparó desde la frontal del área y, tras rebotar el balón en varias piernas extremeñas, de nuevo el mismo Rubén Yubero, recogiendo su propio rechace consiguió el 1-2.
Javi Borrego hizo de las suyas en el minuto 41, regateando y entrando en el área, pero no pudo resolver con un tiro a puerta. El salmantino estaba gustándose, y esto era bueno para una Segoviana que se marchó al vestuario con una buena ocasión de Fer Llorente, con ventaja y con muy buena imagen.
En el inicio de la segunda mitad la Sego disfrutó de un corner nada más empezar, mientras que el goleador Iván Fernández buscó la escuadra, en una clara oportunidad de los de casa. Dani Segovia y Arévalo tuvieron las suyas en una segunda parte algo más gris y dubitativa en su inicio.
Tras la vuelta de vestuarios la Segoviana sufrió demasiado. En la particular lucha entre suplentes, fueron los verdes los que ganaron la batalla. Se le estaba haciendo muy largo el partido. Y es que los visitantes veían cómo se acercaban cada vez más los hombres de arriba del Cacereño.
Hasta que llegó el gol de la tranquilidad para los de Ramsés Gil. Su autor fue Dani Segovia, en el minuto 80. Pero cuando aquello iba a parecerse a un camino de rosas tresminutos después Jorge Barba inyectaba una dosis de suspense con el 2-3. Desde entonces, y hasta cumplirse los ocho minutos que añadió el árbitro, alguna ocasión más por ambos lados. Pero estaba claro que la victoria no se le podía escapar a la Sego.
CP Cacereño: Robador, Bruno (Jorge Barba, m.46), Piri, Clausí, Iván Fernández (Lolo Plá, m.69), Karim (Diego Díaz, m.46), Martínez, Telles, Viñuela (Lobato, min.84), Tellechea y Matovu.
Gimnástica Segoviana: Carmona, Javi Marcos, Manu, Hugo Díaz m.61, Dani Segovia, Javi Borrego (Ivo, min.81), Astray, Fer Llorente, Chupo (Arévalo, m.61), Abel y Silva.
Goles: 0-1 (minuto 7), Javi Borrego; 1-1 (minuto 8), Iván Fernández; 1-2 (minuto 26), Chupo; 1-3 (minuto 80), Dani Segovia; 2-3 (minuto 85), Jorge Barba.
Árbitro: Jerónimo Montes García-Navas, auxiliado en las bandas por Fernando Luciano Ventura Verderico y Adrián Pinilla Serrano. Amarillas a los locales Viñuela y Tellechea; y a los visitantes Fer Llorente y Javi Marcos.