«Los pensamientos negativos te pueden llevar a perder partidos, aunque seas mejor», dice Ángela Rodríguez, la joven prodigio del tenis de mesa, un deporte que está muy presente en la vida de la nueva diputada por Segovia. María Cuesta (Madrid, 17 de septiembre de 1973), mujer y madre de jugadores de tenis de mesa, ha sido la gran triunfadora en la provincia de las elecciones generales del pasado domingo. Y como revela su trayectoria política prefiere mirar hacia adelante que perderse en pensamientos negativos.
Licencia en Derecho y máster en Asesoría Jurídica de Empresas, se dedica a la gestión y dirección de la empresa de su familia pero, tras los resultados del 23-J, no parece que vaya a quedarle mucho tiempo para esa tarea. En la actualidad es también la alcaldesa de Espirdo y hasta este jueves diputada provincial, cargo al que renuncia en favor de la alcaldesa de Brieva, María del Pilar Martín. «Es una currante incansable», destaca el abogado Isaac Toranzo, quien dirigió su campaña cuando en las elecciones de 2016 fue cabeza de lista al Congreso por Ciudadanos.
Cuesta ha dado varios saltos en política. En 2011 fue elegida por primera vez regidora de Espirdo tras presentarse a las elecciones como cabeza de lista de la agrupación Candidatura Independiente Municipal de Espirdo. Más tarde se sumó al proyecto de Ciudadanos, donde no logró romper la hegemonía de PP y PSOE y donde acabó protagonizando una rebelión que marcó un punto de inflexión en Segovia hasta la actual irrelevancia de la formación naranja. Junto a un grupo de militantes -algunos de ellos miembros de la junta directiva del partido, como Toranzo- se dio de baja sin renunciar al acta de concejala en Espirdo ni a la de diputada provincial, donde pasó a ser no adscrita.
«Ojalá fueran como ella todos los políticos. Si hay alguien de la que puedes decir que no ha llegado a la política para servirse de ella, esa es María. Siempre está preocupada de los problemas de sus administrados y no se la pone nada por delante cuando tiene que luchar. Si el PP la ha presentado como número dos al Congreso de los Diputados llevando solo cuatro años allí y con la de gente que hay en el PP, por algo será», subraya Toranzo.
Tras haber mantenido contactos también con el PSOE, Cuesta fichó por el PP en 2019 para encabezar la candidatura en las elecciones municipales de ese año en el Ayuntamiento de Espirdo. «Tiene vocación pero no ideales. Yo no podría haberme ido al PP o al PSOE... Y tuve ofertas», señala el exdiputado provincial por Centrados Juan Ángel Ruiz. «A diferencia de otros no está en política porque necesite dinero. Lo que hace lo hace porque la gusta. Bien porque la guste figurar, que también, o porque la gusta ser útil. Nuestra relación se rompió un poco cuando se fue al PP, eero es buena mujer y colabora mucho siempre que puede. La gusta estar en todos los fregados ayudando», añade.
La nueva diputada nacional por Segovia ha ganado peso específico en el PP de manera progresiva. En 2019 fue elegida como diputada provincial para sustituir a José Luis Sanz Merino, nombrado en ese momento viceconsejero de Infraestructuras de la Junta de Castilla y León. Y hace unas semanas resultó agraciada con el número dos de los populares en la lista al Congreso de los Diputados, donde las elecciones municipales ya habían revelado que el PP podía recuperar el segundo escaño por Segovia.
«El PP cuenta con personas mucho más capacitadas en la provincia de Segovia para poder desempeñar una responsabilidad de este calado. No obstante le deseamos acierto y atención a los segovianos de toda la provincia, porque será positivo para Segovia», señalan fuentes de Ciudadanos que critican su paso por la formación naranja. «María Cuesta es una persona que demostró escaso interés en la provincia de Segovia durante los dos años que ejerció como diputada provincial de Ciudadanos. Muestra de ello es la falta de atención a los asuntos de la provincia durante esos años -de 2015 a 2017-, en los que se lucró de los recursos del grupo provincial para su propio interés y dar un salto político a otra formación, lo cual es lícito pero éticamente reprobable por hacerlo de esta manera», lamentan esas mismas fuentes. Pero la exnaranja ya se dirige al Congreso de los Diputados.