Las autoridades de Alemania y Austria han incrementado en las últimas horas sus medidas de vigilancia ante las sospechas a posibles atentados coincidiendo con la Navidad, después de que se hayan detectado movimientos que apuntarían a potenciales ataques sobre edificios religiosos de Colonia y de Viena.

En el caso de Colonia, la Policía ha registrado la catedral con perros adiestrados en la búsqueda de explosivos antes de los oficios previstos con motivo de la Navidad, según fuentes de los servicios de seguridad citadas por la agencia DPA. También prevé registrar a todos los fieles y visitantes que quieran acceder al templo.

El temor a posibles actividades terroristas, vinculadas en principio de Estado Islámico Provincia de Jorasán --la filial del grupo en Afganistán-- se extiende también a Viena, donde la Policía ha confirmado un mayor despliegue de policías armados y también de agentes con ropa civil.

"La atención de la Policía se centrará principalmente en iglesias y eventos religiosos (...) y en mercados de Navidad", han indicado las autoridades, que han recordado que la alerta antiterrorista se mantiene alta y, por tanto, esto ya implica un mínimo de medidas de seguridad y de controles.

El Ministerio del Interior de Austria ha confirmado el arresto de cuatro personas sospechosas de tener relación con una red islamista, si bien han evitado dar detalles de esta operación, en la que han colaborado los servicios de Inteligencia.