La Junta de Castilla y León inicia hoy una nueva ronda de contactos con los grupos parlamentarios, la tercera desde septiembre, con el objetivo de cerrar un «gran pacto» que permita al Ejecutivo autonómico sacar adelante su proyecto de presupuestos para 2025. El primer invitado, tal y como había anunciado el portavoz y consejero de Economía, Carlos Fernández Carriedo, será el Grupo Socialista, principal partido de la oposición y cuya abstención «sin condiciones» posibilitó hace una semana la aprobación del techo de gasto. El siguiente en pasar por el despacho del consejero de Economía será Vox, que está citado para el viernes.
Tanto socialistas como Vox han marcado una exigencia compartida al Gobierno autonómico para comenzar a negociar: que la Junta registre en las Cortes el proyecto de Presupuestos para 2025. Algo que, tal y como reconoció el pasado jueves Fernández Carriedo, no está en los planes del Ejecutivo regional, cuya agenda pasa por cerrar primero un «gran pacto» con los grupos para evitar sorpresas y tener la seguridad de que las cuentas verán la luz, una vez elevado al Parlamento el proyecto de presupuestos. «Tenemos las ideas muy claras sobre nuestros principios y nuestros valores, tenemos que ver que nos piden los demás», resumió el consejero de Economía hace días, cuando reconoció que la Junta ve «margen» para modificar partidas del presupuesto para incluir peticiones de los grupos que se sumen al pacto.
Mientras, desde el PSOE, su líder Luis Tudanca lleva varias jornadas reiterando que la Junta debe registrarlo en las Cortes como paso previo a la negociación de un posible acuerdo para demostrar que no es cierto «lo que muchos pensaban que era un farol, que no querían tener presupuestos». Ese paso previo, insiste el portavoz socialista, es necesario «para poder hablar de esto, de las cosas que comer». Postura similar a la de Vox, que también condiciona a registrar en las Cortes el presupuesto para comenzar a negociar. «Durante el último mes, hemos asistido a un ejercicio de circo y pantomima por parte del PP».