La mítica serie creada en los años 90 vuelve este 2025 con su innovadora edición número siete repleta de estrategia, historia en mayúsculas y relatos fascinantes: imaginen que Napoleón dirige China o que Maquiavelo está al frente de Roma. Pues eso y mucho más es lo que propone Sid Meier's Civilization VII, porque «el pasado es mucho más de lo que dejamos atrás», como reza la primera frase de presentación del juego. Y con esta idea por bandera, el título, que ya está disponible de PS5, PS4 Xbox Series X|S, Xbox One, NintendoSwitch, PC y Mac, replantea su núcleo jugable desde la base.

«El lanzamiento de Civilization VII, un juego que honra y eleva el legado de una de las franquicias más queridas en la historia de los videojuegos, es un momento increíblemente especial», explica Catharina Lavers Mallet, vicepresidenta senior de Core Games en 2K. 

En Civilization VII, las decisiones estratégicas dan forma al linaje cultural de un imperio en evolución. Es el participante el que gobierna  el juego como si se tratase de un líder de la Historia, mientras dirige su propio destino seleccionando una nueva civilización que represente a un imperio en la Era de la historia. También es el encargado de construir ciudades y maravillas arquitectónicas para expandir el territorio, mejorar la civilización con avances tecnológicos y conquistar o cooperar con pueblos rivales, al tiempo que explora los rincones del mundo desconocido. Se trata de una inmersiva experiencia en solitario o en modo multijugador online.

HistoriadictosAdemás, el título marca un hito en la historia de la saga, llevando por primera vez la experiencia del juego al mundo de la realidad virtual y mixta, con una inmersión sin precedentes en el género.

Igualmente, los escenarios muestran un carácter tridimensional, lo que permite ofrecer una excelente perspectiva para entender bien todos los elementos del juego y así desplegar unidades y edificios de toda índole y estilo arquitectónico. Del mismo modo, la exquisita banda sonora, que acompañará durante las diferentes eras, adaptándose a las distintas culturas y estilos tribales, hacen que la experiencia sea siempre agradable. Una música orquestal bien compuesta recuerda a los participantes que se ha entrado a una de las más longevas partidas de turnos infinitos.