La Junta de Castilla y León deja caer a Sonia Tamames, ya exdirectora general de Salud Pública, tras sus polémicas palabras en las que afirmaba que la pandemia de la covid-19 «no fue de gran gravedad». «Sus declaraciones han sido un error y lo primero que tengo que hacer es pedir disculpas a toda la población en nombre del Gobierno de Castilla y León», expuso rápidamente el presidente autonómico, Alfonso Fernández Mañueco, encargado de anunciar la dimisión de Tamames de su cargo casi tres años después de llegar a el de la mano del consejero Alejandro Vázquez, y que ahora asume de forma interina Álvaro Muñoz Galindo, director general de Calidad e Infraestructuras Sanitarias. Una renuncia que llega después de las palabras de la exalto cargo de la Consejería de Sanidad en el programa 'Cuestión de Prioridades' de Castilla y León Televisión en las que aseguró que la covid «afectó en unas etapas muy tempranas a la población joven pero rápidamente el virus evolucionó para convertirse en grave solo en los extremos de la vida y fundamentalmente en las personas mayores».

«Solo ya con el dolor por la pérdida de vidas humanas, el sufrimiento posterior a aquellos que padecen secuelas, es suficiente, sin entrar en las consideraciones del daño al sistema público de salud, la crisis social y económica que produjo la pandemia», manifestó Fernández Mañueco, que reiteró sus disculpas a la población. «Ante un error se toman decisiones», insistió el presidente, que enmarcó esta dimisión en el «alto nivel de exigencia» que tiene la Junta.

Misma explicación que la dada, casi al mismo tiempo, por el portavoz autonómico,CarlosFernández Carriedo, que detalló que la renuncia es «a petición propia» de Tamames. El también consejero de Economía quiso desmarcar al Ejecutivo de la Comunidad de las palabras de la exalto cargo y aseguró que desde la Junta «seguimos insistiendo en nuestro compromiso y reconocimiento de la gravedad de la pandemia, con las vidas perdidas, el dolor causado, y los daños a todo el tejido social y económico de Castilla y León». Es por ello que reiteró el perdón verbalizado por Fernández Mañueco y quiso «pedir disculpas» a cuantos se hayan visto afectados «al tener que rememorar aquellos momentos».

Tamames dimite de directora de Salud Pública tras la polémica - Foto: Rubén Cacho ICAL

En la misma línea, el portavoz adjunto del Grupo Parlamentario Popular, Miguel Ángel García Nieto, también pidió disculpas por el «error muy grave» y «bastante lamentable» de la ya exdirectora directora de Salud Pública.

Oposición

Mientras, el portavoz del Grupo Socialista en las Cortes, Luis Tudanca, saludó la dimisión de Sonia Tamames por sus declaraciones «indecentes, frívolas y con falta de sensibilidad» en relación a la gravedad de la pandemia, pero sostuvo que su marcha se produce porque se les «ha pillado». «Es lo más ofensivo y lo más grave que he escuchado a nadie desde aquel famoso 'se iban a morir igual'», señaló Tudanca, que insistió en que su salida «no se produce porque Mañueco piense que es grave, sino porque les hemos pillado tras unas declaraciones indecentes». Igualmente, el secretario general del PSOE de Castilla y León, Carlos Martínez, consideró las declaraciones como un ejemplo de «la pérdida de alma» de la que acusó a los responsables políticos del Gobierno autonómico. «No aspiro a que se vaya, porque la dimisión es un cese voluntario. Quiero que la cesen».

Mucho más duro fue Francisco Igea, vicepresidente de la Junta durante la pandemia, quien al inicio de este jueves pidió su cese inmediato cuando asistía a la Comisión de Sanidad de las Cortes, donde fue expulsado por mostrar un cartel con las palabras de Tamames al grito de «puta vergüenza».