La calle Menacho de San Rafael permanece acordonada desde hace dos semanas. Un enorme socavón en medio de la carretera impide el paso de los coches y las grietas que se aprecian en los alrededores avisan de que los desperfectos por la DANA que azotó El Espinar el pasado 3 de septiembre no han terminado de aflorar todavía, a pesar de que ha transcurrido más de un mes.
El Ayuntamiento de El Espinar ha cifrado en 6,2 millones de euros los daños provocados por las inundaciones solo en las infraestructuras públicas, ya que además inundó decenas de viviendas y garajes de propietarios privados. Su reparación comenzará «lo antes posible», según asegura el alcalde, Javier Figueredo (PP), pero todavía no tienen la certeza de que el coste de los arreglos no vaya a aumentar ante el posible surgimiento de nuevos hundimientos o averías.
«El agua de la red de saneamiento se salió de su circuito normal, fue lavando la tierra por debajo de la carretera y dejándola hueca y con el peso de los coches al final se ha hundido», explica Figueredo sobre el socavón en la calle Menacho, que va a obligar a los servicios municipales a reurbanizar casi por completo esta vía. El Ayuntamiento ya trabaja en la elaboración de los proyectos y de los pliegos de condiciones para licitar este arreglo y los numerosos más que van a ser necesarios en el municipio tras el paso de una DANA histórica.
Los 159 litros de agua por metro cuadrado que cayeron (42 en una hora) se convirtieron en uno de los récords de ese temporal en España y llevaron el miedo a los vecinos de El Espinar. «A los adultos se nos va olvidando, pero cuesta hacerle comprender a una niña pequeña de diez años que eso nunca había pasado aquí y que probablemente no vuelva a pasar», cuenta Yasmany Román, quien junto a su mujer y sus dos hijos vive en un piso de alquiler desde ese 3 de septiembre.
El agua entró en su casa de la calle Arroyo Merlero hasta el punto de generar momentos de pánico. Ellos se salvaron, pero los electrodomésticos y la tarima de la vivienda quedaron para la chatarra. «Estamos sacando fuerzas de flaqueza porque sobre todo para los niños ha sido muy traumático. A ver si con el dinero que hemos recibido del seguro podemos empezar a construir nuestro hogar de nuevo», apunta Román mientras vuelve a mostrar a la cámara de televisión el estado en el que quedó su piso.
A la vuelta de la esquina, Marta Fonseca no ha dejado de abrir su óptica a diario pese a que todavía es visible en el establecimiento el rastro del paso del agua del que también fue víctima. «Fue algo demoledor. Lo ves en otros en otros sitios por la televisión, pero nunca piensas que te va a pasar a ti . Ahora nos falta por arreglarlo todo porque el mobiliario, el suelo y las puertas se han deteriorado, pero he podido seguir trabajando, que es lo más importante», destaca, al tiempo que expresa su agradecimiento por la ayuda recibida: «El día que ocurrió la verdad es que yo estaba desolada, pero enseguida acudieron los vecinos con escobas y con todo lo posible para intentar sacar el agua. De ahí que haya podido seguir trabajando. También quiero agradecer a la Alcaldía y a la Corporación que estuvieran aquí con nosotros hasta las siete de la mañana de aquel día intentando paliar en todo lo posible esta situación. Y ahora nos están acompañando en todo momento. En cuanto les llamas, ellos acuden e intentan ayudarte en lo más posible».
Respecto a la obra civil, la intención del Ayuntamiento es licitar cada proyecto de manera individual y los está elaborando con sus recursos propios y también con la colaboración de empresas externas. «Los técnicos municipales tienen ya marcadas zonas en las que se pueden producir desprendimientos como el de la calle Menacho de San Rafael o incluso más grandes. Hay muchas zonas en las que ya se nota que se va rasgando el asfalto», indica el alcalde. «Yo creo que en la provincia de Segovia ha habido pocos desastres como este que hemos vivido», concluye.
ZONA CATASTRÓFICA. El Ayuntamiento de El Espinar aguarda la declaración de zona catastrófica por parte del Estado. El Consejo de Ministros acordó hace dos semanas declarar zona afectada gravemente por una emergencia de Protección Civil 28 comarcas dañadas en septiembre por distintos fenómenos meteorológicos adversos e incendios forestales. Pertenecen a las comunidades de Andalucía, Aragón, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Cataluña, Comunitat Valenciana, Illes Balears, Comunidad de Madrid y Región de Murcia. Pero no ofreció más detalles, para disgusto del Ayuntamiento de El Espinar, que espera conocer las ayudas que recibirá para afrontar con más tranquilidad los desperfectos causados por la DANA. «Falta que se publique en el Boletín Oficial del Estado todos y cada uno de los municipios que van a estar acogidos por esa declaración de zona catastrófica. Normalmente las ayudas vienen a cubrir el 50, 60 o 70 por ciento de la valoración que se haga», explica el alcalde espinariego, Javier Figueredo.