El Gobierno regional y el Partido Popular salieron ayer en tromba a defender la intervención que el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, realizó este miércoles ante el Comité Europeo de las Regiones para ratificar la «postura clara» de Castilla y León contra la violencia de género, y reivindicaron la «posición activa» del Gobierno autonómico en favor de las mujeres y en la lucha contra el machismo. Todo ello después de que la oposición parlamentaria criticará las palabras del dirigente regional, al que acusaron de hacer «pasar vergüenza» a Castilla y León en Bruselas. «Nada nos va a parar en este esfuerzo del acceso al trabajo en condiciones de igualdad y lucha contra la violencia de género», sentenció el portavoz autonómico y consejero de Economía, Carlos Fernández Carriedo, tras el Consejo de Gobierno, donde comprendió la «crítica política» en la que se basa la oposición a un Gobierno, pero incidió en que ninguna de ellas «podrá tapar el escándalo» de las noticias que surgen día tras día por las reducciones de condena de la ley del 'solo sí es sí', informa Ical.
En la misma línea, el Grupo Parlamentario Popular en las Cortes defendió la presencia en Bruselas del presidente de la Junta: «El representante es el presidente y, en ocasiones, se delega en el vicepresidente, como sucedía en la legislatura pasada», reconoció el portavoz popular, Raúl de la Hoz, que no obstante desmarcó el hecho de que esta vez no fuera García-Gallardo quien acudiera a la sede de las instituciones de la Unión Europea de la temática en debate: la lucha contra la violencia de género. Para el portavoz, «lo bueno para la Comunidad, es lo malo para la oposición», y señaló que, en su intervención, Mañueco «ha defendido la posición de la Junta en relación con la violencia de género, que pese a lo que algunos digan, no se ha visto alterada».
«Pues sí, Mañueco sigue empeñado en ponernos de moda por toda Europa. Menuda vergüenza nos hace pasar…», sostuvo por su parte el líder regional del PSOE, Luis Tudanca, en su cuenta de Twitter, en alusión a las declaraciones del alcalde socialista de Coulaines (Francia), Cristophe Rouillon, quien en este foro reclamó a Mañueco «alejarse de la ultraderecha» y apostar por «políticas que garanticen la seguridad de las mujeres». Mientras, el procurador de Ciudadanos, Francisco Igea, celebró irónicamente que el presidente haya ido «por fin» a Bruselas pero consideró «un poco penoso» que haya sido para ser «abroncado» por las políticas de género. «No son estereotipos, es que usted gobierna con un partido que niega la existencia de la violencia machista», añadió Pablo Fernández (UP).