Apenas una veintena de socios acudió el sábado a la asamblea ordinaria del Club Deportivo La Granja. El presidente, Javier Montero, reconoció una deuda de 12.000 euros, aunque varios socios -entre ellos el expresidente Pablo Alejandro- han pedido una revisión de las cuentas de los últimos cuatro años, ya que consideran que la deuda es mayor.
Sin equipos y al borde de la desaparición, el número de socios o la situación del club fueron los momentos más tensos de la asamblea. "¿Qué sienten ustedes con lo que han hecho en estos tres años? Han acabado con un club de 75 años y mil y pico jugadores", intervino el expresidente Pablo Alejandro.
"Creo que no tener base por debajo es un problema para cualquier club, creo que un club que tiene una asistencia media de socios al campo de 17 personas no tienen ningún tipo de viabilidad", replicó el actual máximo mandatario. La actual directiva tiene la intención de seguir con el club para evitar su desaparición y espera encontrar gente que quiera implicarse en su futuro.