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Javier Gómez afronta su tercera legislatura al frente del Ayuntamiento de Cabañas de Polendos, una localidad perteneciente a la comarca que está unida por los ríos Pirón y Polendos y que según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) de 2024 cuenta con una población de 199 habitantes.  

¿Qué le ha animado a volver a presentarse como alcalde de la localidad? 

El poder terminar algunas de las cosas que tenemos pendientes. 

¿Qué es lo mejor de ser alcalde? 

El poder dejar hechas las cosas que tenemos pendientes en el pueblo y que así vaya evolucionando, además de trabajar para poder dar lo mejor a los demás. 

¿Y lo peor? 

Lo peor es algunas veces el conflicto que te genera con algunos vecinos, pero tampoco es una cosa gravísima. 

¿Cómo afronta esta legislatura? 

Pues con varios proyectos sobre la mesa: queremos terminar la rehabilitación de una vivienda, lo que era las antiguas escuelas de Cabañas de Polendos, porque queremos apostar por la recuperación de edificios municipales y de viviendas con el objetivo de intentar atraer a gente para vivir en el pueblo. Además, estamos avanzando en el proyecto de realización de la estación depuradora de aguas residuales y un trasvase de agua de Cabañas de Polendos a Mata de Quintanar, donde no tenemos agua.

¿Cuáles son los principales proyectos de estos cuatro años? 

Lo más importante es la realización del trasvase de agua de Cabañas de Polendos a Mata de Quintanar porque ahora mismo sí que es cierto que no tenemos niveles de arsénico en el municipio de Mata, pero hay escasez de agua sobre todo cuando llega el verano. Hemos firmado un acuerdo con la Junta de Castilla y León para la finalización de las obras, el cual se ha asignado a la Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente (Somacyl) pero no lo está ejecutando. Hasta ahora, el Ayuntamiento de Cabañas de Polendos ha ejecutado ya dos tercios de la tubería de canalización con la expectativa de que Somacyl finalizara la obra restante, pero ahora mismo Somacyl no nos atiende. Yo llamo todas las mañanas para que realicen las obras antes del verano, pero desde la Sociedad nos dicen que tienen que firmar el convenio con la Diputación de Segovia, y desde la institución provincial alegan que Somacyl es el subsidiario, asique al final no avanzamos nada. 

Llevamos cinco años detrás del trasvase de agua, y nosotros hemos ejecutado las obras que hemos podido, pero necesitamos que nos ayuden. Esto es un quebradero de cabeza, porque estás todo el día pensando en cómo solucionarlo pero no avanzamos, y no puede ser. Yo considero que 250.000 euros que es el precio de la obra, de la que probablemente nosotros tengamos que aportar el 20 por ciento, no es un gasto desorbitado para la Junta de Castilla y León. 

¿Cuál es la solución para este verano? 

La solución continuará siendo subir cisternas de agua desde un núcleo al otro, porque tampoco podemos hacer mucho más. Sí es cierto que estamos barajando la idea de utilizar un camión cisterna para que el transporte sea más sencillo. 

¿Han aprobado el presupuesto de 2025? 

Estamos en ello. El presupuesto rondará los 170.000 euros. 

¿Dónde prevén destinar las principales partidas? 

Vamos a aprovechar las ayudas del Plan de Ayudas a Inversiones Municipales (Paimp) de la Diputación de Segovia para llevar a cabo el arreglo de alguna calle. Además, vamos a rematar como ya he comentado la casa de las escuelas para destinarla a alquiler y vamos a intentar recuperar la antigua depuradora.

¿Hay algún proyecto pendiente de otros mandatos? 

Me gustaría hacer cosas que se han quedado atrás, como la recuperación de la ermita de la Aguja, pero es un proyecto complicado. 

La ermita de la Aguja forma parte de la Lista Roja de Patrimonio. ¿Se prevé alguna manera de conservarla? 

Lo principal sería intentar que las paredes no se vinieran abajo e ir recuperándola poco a poco. Lo más importante para ello sería poner el tejado para que no se degradara más el interior, pero tiene un coste muy elevado para nosotros. 

¿Qué balance hace de 2024? 

Ha sido un año normal. Hemos recuperado bastantes vías de Mata de Quintanar y hemos tenido muchas actividades culturales repartidas a lo largo del año. Además, tenemos el centro de artesanía que acoge muchas actividades y mercadillos. 

También hay que destacar que Mata de Quintanar ha ido creciendo en cuanto a personas se refiere, y sobre todo personas jóvenes. Ahora queremos intentar atraer  población a Cabañas de Polendos. 

En cuanto al tema de población, ¿qué medidas se llevan a cabo desde el Ayuntamiento para intentar aumentar el padrón? 

Entre Cabañas de Polendos y Mata de Quintanar hemos recuperado cuatro casas. Ahora una de ellas es una casa rural, pero son casas que estaban perdidas porque no estaban en condiciones. Ahora que estamos terminando la rehabilitación de otra, tenemos cola de personas que quieren alquilarla. Lo cierto es que ambos municipios tienen demanda, pero en Cabañas de Polendos hay poca vivienda. Hay muchas casas antiguas, pero hay que rehabilitarlas. Mientras que en Mata de Quintanar el crecimiento va a ser más complicado porque ya se han vendido todas las casas que había.  

La localidad cuenta con el centro de artesanía 'Las Caravas', ¿qué aporta al municipio?  

Sí, hay doce talleres artesanos que hacen que la gente visite el municipio, coman en el restaurante y que muchos de los artesanos se queden a vivir aquí o en pueblos de la zona, ya que desarrollan su actividad diariamente. 

¿Qué necesidades ve en el pueblo? 

Lo más importante es solucionar el tema del agua. Además de que nos dieran opción de alguna manera de intentar atraer población. En cuanto a los servicios, por regla general se acude a Segovia. Y sí que es cierto que nos han puesto una línea de autobús con horarios a las 7 y a las 9 de la mañana, pero no estaría mal que añadieran algún viaje más a media mañana y a media tarde.