La Gimnástica Segoviana recibió un duro varapalo en su visita a Cobeña, donde el Ursaria goleó (3-0) en una segunda parte en la que los de Ramsés Gil desaparecieron, después de una primera parte propicia, pero infructuosa, para los gimnásticos. Un partido más Astray ocupó un puesto en el centro de la defensa, esta vez junto a Javi Marcos. Además, otra de las novedades en el once inicial fue la presencia de Maroto como referente en el ataque segoviano.
Un lanzamiento de falta de Merencio, al que no llegó Javi Borrego de cabeza, fue la primera ocasión del partido. La Segoviana apretaba en busca del control del balón y lo hizo con éxito, ya que los madrileños tardaron demasiado en entrar en la dinámica del partido. Merencio y Maroto formaron un buen tándem, y el joven canterano gimnástico lo hizo muy bien en su estreno en el once inicial azulgrana. Salieron muy fuerte los de Ramsés Gil y, si bien no hubo demasiadas ocasiones, sí fueron el germen de una gran actuación en la primera parte en un campo complicado como el de Cobeña.
Cerca del cuarto de hora, Maroto tuvo un par de oportunidades que no acabaron bien. Pero a la tercera el canterano pegó un zapatazo que se fue cruzado, por muy poco, pegado al poste. La Gimnástica iba por buen camino. Silva se sumó al ataque y lo intentó desde lejos, sin éxito. Con el balón ya suyo por completo, los de blanco llegaron a la media hora con un planteamiento más posicional, jugando más en el centro del campo, con la garantía que ofrecían Javi Marcos y Astray cerrando atrás en caso de pérdida.
Poco a poco el Ursaria se puso las pilas por medio de Christian, su hombre gol. Pero Carmona estaba seguro gracias a su compañero Javi Marcos. De nuevo de falta, De la Mata rozó el gol tras centro de Merencio; y en el 37 Jordán también la tuvo, tras una jugada ensayada. Antes del descanso Astray tuvo que ser atendido por un golpe en la cabeza. Por parte madrileña Christian y su velocidad hicieron de las suyas al contragolpe pero Sergio Arévalo estuvo al quite. Una caída de Borja en el área fue protestada por los locales, entre ellos el entrenador madrileño, que vio la tarjeta roja.
Tras la reanudación, el Ursaria salió con más intensidad, pero la Sego estuvo atenta en la defensa, si bien el 1-0 estuvo sobrevolando el choque hasta que llegó el tanto de Jacobo en un error gimnástico que les costó caro. En el primer saque de esquina de la Gimnástica fue infructuoso, con un remate de cabeza. Los visitantes movieron banquillo con Dani Segovia y Fer Llorente, que entraron por Hugo y Merencio. Antes, Hugo tuvo la mejor hasta entonces, con un remate al larguero. Empujaban los de Ramsés Gil, y Maroto seguía rozando el gol. Pero en un tres para dos, en un contragolpe de libro, de nuevo Jacobo anotó el segundo gol de los del oso.
El 2-0 fue un jarro de agua fría. Los segovianos lo sintieron en su piel, sin poder ver la luz al final de un túnel demasiado largo. La Sego se ensombreció desde el gol. Pero los madrileños no habían dicho su última palabra. Así, Cristian se fue como un rayo por la izquierda para anotar el tercero, batiendo por bajo a Carmona (3-0). En cuestión de 20 minutos todo se fue a pique. Por ello, Ramsés puso sobre el campo defensa de tres, echando el resto en busca de un milagro que no sucedió. Incluso estuvo cerca el cuarto, de no ser por Carmona. Mala imagen la de la Gimnástica, que el miércoles tendrán la ocasión de recomponerse contra el Sestao River en Copa del Rey.