«Estamos considerando atender  una petición que hacen los feriantes porque dicen que se quedarían fuera del ferial un buen número de familias cuya única forma de subsistencia es esta. No voy a revivir el enfrentamiento y voy a intentar ponerme en la piel de estas personas y comprender esta situación y evitar que estos trabajadores, si no llegamos a un acuerdo, al final se queden sin los ingresos de la feria de Segovia». Así ha abierto de nuevo  el alcalde, José Mazarías, la vía del diálogo con los feriantes para que la ciudad no se quede sin ferias y estas se celebren nuevamente en La Albuera, aunque insiste en la idea del «boicot» al gobierno municipal porque «no son capaces de organizarse entre ellos». 

El anuncio de Mazarías en la rueda de prensa donde habitualmente repasa los asuntos de actualidad y de la Junta de Gobierno Local ha sido bien recibido por los feriantes que, sin embargo, hasta las 17 horas del jueves todavía no habían sido convocados a un nuevo encuentro por parte de los responsables municipales.  

Por su parte, desde el Grupo Socialista, su portavoz y ex alcaldesa, Clara Martín, indicaba que es de sentido común rectificar y ha recalcado que es la primera vez que el alcalde accede a dar su brazo a torcer en casi un año de mandato. 

Mazarías se ha mostrado contrariado por la actitud de los feriantes la semana pasada y nuevamente ha recordado que han sido ellos los que han elogiado la céntrica ubicación del antiguo regimiento y quienes hace un año aseguraron que no iban a regresar a La Albuera, un espacio que describían «como el peor recinto ferial de España».  

En este sentido, el regidor segoviano ha mantenido que «vamos a intentar buscar un acuerdo y que Segovia no se quede sin ferias pero vamos a intentar llevar a cabo nuestro proyecto en el sitio que nosotros hemos convenido. Si no es así, tendremos que buscar un acuerdo ante un boicot más que evidente».

Ha insistido en que los feriantes «no son capaces de solucionar el principal problema que tienen por la cantidad de peticiones que hay de familias que ahora sí quieren venir con sus negocios al regimiento y ya les anuncio que si vamos a otro sitio muchas no vendrán». Abundando en ese argumento ha explicado que les pidió que le garantizasen que toda esa demanda se mantendrá si el ferial se ubica en otro sitio diferente al antiguo cuartel «y me dijeron que no, que eso no me lo pueden asegurar».

Procedimiento. Mazarías ha cuestionado, además, el procedimiento de adjudicación de las parcelas del ferial en los últimos años porque consideran que se ha convertido «en un mercadeo totalmente ajeno al Ayuntamiento». Las condiciones del pliego utilizado hasta 2023 «les permite consolidar derechos a los que han estado en Segovia durante los últimos años, con reservas de parcelas que  manejan entre ellos porque pueden cederlas a otros feriantes si no vienen». 

El Decreto de Alcaldía que reguló la distribución y autorización de atracciones y otros puestos de feria en 2023 recoge, sin embargo, que el Ayuntamiento se reserva «el derecho de admitir o rechazar aquellas instalaciones que incumplan la normativa reguladora de la actividad o que no considere aptas para la feria, o no se ajusten al diseño de la misma», así como a «modificar o rediseñar, cuando las circunstancias lo exijan, las ubicaciones actualmente existentes».

Acampar en La albuera. Ángel Lerma, portavoz de los feriantes, comentó, antes de conocer la nueva vía de negociación abierta por el alcalde, que no les quedaba otra opción que «aparcar nuestros camiones en La Albuera» durante ese periodo festivo, pero sin ferias. 

Lerma reconoce que, efectivamente, el antiguo regimiento «nos gusta porque es céntrico pero es que «no entramos los que estuvimos en La Albuera el año pasado. Es inviable».

Entre las dificultades, señala que las calles del regimiento tienen una longitud de 70 metros y «no hay manera de encajar, por más que lo hemos intentado».

Desde el colectivo, este feriante pedía a principios de esta semana «que recapacite el alcalde, y ponga la mano en el corazón, porque aunque el ferial que quiere está bien situado, no entramos. Esperamos que entienda que no es un capricho, ni un órdago ni nada por el estilo». 

Tres alternativas. La propuesta del programa electoral del PP es que el recinto ferial sea estable y reúna las condiciones necesarias para celebrar otras ferias y eventos similares y sirva también como aparcamiento disuasorio. 

El proyecto del gobierno municipal es ubicar ese ferial junto al edificio CIDE pero no ha sido posible ejecutarlo antes de las fiestas de este año porque se encuentra dentro del área de seguridad del campo de tiro de Baterías y la autorización del Ministerio de Defensa ha llegado este mismo mes de abril. 

Ante ese contratiempo, el equipo de José Mazarías se ha decantado por recuperar una zona degradada de Santa Eulalia, las instalaciones del antiguo regimiento de artillería, junto a Campus María Zambrano de la UVa. 

El rechazo de los feriantes ha motivado que el alcalde no descarte ahora recuperar el ferial donde ha estado desde 2017, entre el Colegio Eresma y la Ciudad Deportiva, en el barrio de La Albuera.