El club había avisado a los medios de comunicación que cubren habitualmente su información que eran importantes los asuntos que se iban a tratar en la rueda de prensa convocada para la tarde de este lunes en el restaurante Venta Magullo. Y no defraudó. Sin andarse con rodeos el presidente, Agustín Cuenca, anunció que un grupo inversor había manifestado su intención de apostar por la Segoviana y que, tras analizar su proyecto y concluir que es "atractivo", según ha subrayado el propio Cuenca, la junta directiva gimnástica había decidido convocar un referéndum para consultar a los socios si aprueban la conversión de la entidad en sociedad anónima deportiva y, de esa manera, dan luz verde a la entrada de este grupo inversor.
Este se presentará en sociedad el 4 de octubre en una asamblea informativa en la que dará a conocer sus intenciones, y el domingo 20 de octubre desde las diez de la mañana se celebrará la votación en el teatro Juan Bravo. Una jornada que pondrá la guinda a "meses" de reuniones y conversaciones con Teknei, la empresa española con sedes en Madrid, Bilbao y México que pueda dar un giro de 360 grados a la historia de la Segoviana. En su web se define como "un equipo especializado en ofrecer servicios integrales y soluciones innovadoras de tecnología". Juan Carlos Renedo, directivo de la Segoviana, ha añadido que ya mantiene relaciones con clubes de fútbol como el Eibar -en la Segoviana se anuncia en la parte posterior de la camiseta- y que una persona vinculada estrechamente con Teknei y que ha participado en las negociaciones vive en Segovia.
"Quieren llevar al club al fútbol profesional, no mover jugadores, y respetan los valores y la idiosincrasia de la Segoviana", ha abundado el presidente gimnástico, que ha asegurado que mantendría su escudo, sus colores e incluso representantes dentro del consejo de administración que se constituiría. De hecho, el presidente continuaría siendo el propio Agustín Cuenca y de la gestión se encargaría un equipo de trabajo formado por miembros de la actual junta directiva y del grupo inversor, que comenzarían a percibir sueldos en el momento en que se ascendiese a Segunda División B. El reparto de tareas aún no se ha decidido.
De conseguirlo sería la cuarta vez en la historia de la entidad azulgrana, un bagaje escaso en los noventa años que han transcurrido desde su fundación, difícil de variar sin que medie una conversión a sociedad anónima, en opinión de los directivos. Estos recuerdan que "todos los equipos con aspiraciones ya lo son". "Somos un club que funciona bien al que le falta dinero para tirar para arriba. Pero se trata de crecer no a cualquier precio. No es la primera, la segunda, la tercera ni la cuarta llamada que hemos recibido de posibles grupos inversores, pero en Teknei hemos encontrado a gente que habla nuestro mismo lenguaje", ha argumentado Cuenca.
PROCESO DE CAMBIO. De obtener el sí de sus socios, el proceso de transformación en sociedad anónima no culminaría previsiblemente hasta el próximo curso. La inversión que realizará Teknei aún no se ha desvelado, aunque su idea inicial es adquirir al menos el 51 por ciento de las acciones. La cantidad final dependerá de la respuesta del resto de la masa social, que también tendrá la oportunidad de adquirir acciones.
¿Y si los socios rechazan el cambio en el referéndum? "Por coherencia los actuales directivos nos marcharíamos y deberían ser los que defienden seguir como hasta ahora los que deberían coger las riendas del club", ha indicado Cuena, que ha negado que se trate de un ultimátum. "Los directivos estamos de paso, pero nosotros tenemos muy claro que esto es lo mejor y vamos a luchar por ello", ha concluido.