El precio de la vivienda nueva en Segovia no ha dejado de subir en los últimos años. A la escasa oferta de suelo para la construcción de nuevas casas se suma el auge de los pisos destinados a alquiler turístico y a alumnos universitarios. Según un informe dle portal inmobiliario Idealista sobre la evolución del precio de la vivienda en venta en Segovia capital, actualmente el metro cuadrado se encuentra a 1.858 euros, algo que no sucedía desde el año 2012. En lo que se refiere al alquiler, el precio del metro cuadrado se sitúa en 10 euros, lo que supone un alquiler de unos 1.000 euros al mes para un piso de 100 metro scuadrados, una tendencia de crecimiento que tampoco tiene freno.
Es por el difícil acceso a la vivienda por lo que una segoviana ha apostado por la creación de un sindicato de inquilinos a nivel provincial bajo el objetivo de defender los derechos de este grupo de la población y «hacer presión a las administraciones públicas y los partidos políticos, que son los que tienen que ser los encargados de promover este acceso a la vivienda», explica Begoña Morales, impulsora del Sindicato de Inquilinos de Segoiva.
La idea nace de la necesidad. «Yo tuve que volver de Madrid a vivir a Segovia, pensando que al ser una ciudad más pequeña tendría menos inconvenientes a la hora de alquilar una vivienda, al igual que pensaba que el precio sería menor. Pero la realidad ha sido muy distinta y que yo no era la única que tenía este problema. Por eso decidí intentar crear este sindicato de inquilinos, porque me he dado cuenta de que tampoco es una cuestión de edad, sino que también hay muchas personas mayores que también tenían esta dificultad». A esto se suma que el problema no solo se concentra en la ciudad, sino que también se extiende a los pueblos del alfoz. «Ni siquiera en los pueblos la gente se puede permitir una vivienda», revela Morales. Es por ello que tomó la decisión de apostar por esta idea. «Nos están echando de todos los lados y no nos vamos a poder quedar a vivir aquí. Algo había que hacer», lamenta.
A los principales objetivos, que son mediar para potenciar la creación de viviendas públicas y la regulación de los alquileres temporales, que son los dos problemas fundamentales que tiene Segovia, también se suma el ofrecer asesoramiento jurídico a los inquilinos a la hora de firmar sus contratos de alquiler. «Aquí no vivimos, sobrevivimos, y fundamentalmente queremos mediar en beneficio de los alquileres de larga estancia, para que la gente pueda vivir porque está influyendo mucho en el aumento del precio del alquiler tanto los estudiantes universitarios de la IE como los alquileres temporales de verano destinados a los turistas. Con eso los propietarios hacen la temporada». Aunque explica que los rentistas no son conscientes de que este es un problema que también les puede llegar a afectar. «Si los que trabajamos aquí durante todo el año no podemos pagar un alquiler, tendremos que irnos. ¿Entonces quién atenderá a los turistas en la hostelería o en los hospitales?», se pregunta.
Ahora, Begoña Morales busca a gente que quiera formar parte de esta nueva idea. «Por el momento he recibido unas 12 solicitudes para formar el sindicato. Aunque es cierto que muchas más personas me han preguntado para unirse después». Ahora, sus próximos pasos se centrar en reunirse con el sindicato de inquilinos de Valladolid con el objetivo de colaborar en lo que se refiere a la parte legal para que el sindicato de Segovia pueda comenzar a andar. Y es que a corto plazo buscan el apoyo de otros sindicatos, como de Valladolid o Madrid para conocer más sobre cómo poder hacer las cosas.
De cara a un futuro, Morales explica que su meta es conseguir reunirse con diversas administraciones y partidos, de los que por el momento no han recibido noticias. «Por el momento ningún partido político se ha puesto en contacto con nosotros, pero imagino que lo harán cuando el sindicato esté constituido. Sí que es cierto que la Asociación Republicana de Segovia nos ha ofrecido apoyo y el local en el que se reúnen, pero ni los partidos políticos ni ninguna institución se han pronunciado al respecto aún. Lo que sí que ha pasado que a raíz de dar a conocer la iniciativa, la cual compartí en varios grupos de WhatsApp de Segovia, han ido corriendo bulos advirtiendo de que no se inscriba nadie poqrue era una estafa, pero esto es lo típico ucnado una iniciativa no sienta bien a alguien», indica.