En una abarrotada Sala Ex.Presa, anoche se vivió un acto muy emotivo con el protagonismo de los familiares de segovianos represaliados del franquismo que compartieron los padecimientos de sus seres queridos durante la guerra e inmediata posguerra. El motivo de la cita era la presentación del catálogo -editado por el Foro por la Memoria de Segovia- de la exposición permanente La cárcel franquista (1936-1977), que da contenido al Memorial Democrático de Segovia ubicado en La Cárcel_Centro de Creación.
El evento se inició con La Entradilla, a cargo de La Esteva, en homenaje al maestro Agapito Marazuela, ilustre símbolo de los segovianos víctimas de la represión franquista. La periodista Adriana López entrevistó al diseñador Christian Hugo Martín y al comisario de la exposición permanente Santiago Vega Sombría, quienes desgranaron los contenidos del libro-catálogo. A lo largo de 200 páginas y más de 500 imágenes (fotografías individuales y colectivas, documentos, prensa clandestina, cartas de los presos…) recoge todos los contenidos de la exposición permanente del Memorial. También incorpora unos QR con enlaces para ver los documentales Reencuentro con la historia (que narra la historia de la cárcel de Segovia) y Tras las rejas franquistas (testimonios de segovianas y segovianos presos sobre su estancia en la cárcel). Santiago Vega destacó la importancia para Segovia de contar con un edificio de carácter singular, que además cuenta con la única exposición permanente de España que explica el sistema penitenciario durante toda la dictadura a través de una misma prisión.
Sin duda, lo más emotivo de la noche fueron las intervenciones de los familiares de segovianos represaliados del franquismo que compartieron los padecimientos de sus seres queridos durante la guerra e inmediata posguerra. Trabajadores asesinados en agosto de 1936 por sus ideas o su militancia -legales durante los años de la democracia republicana- o como venganza porque sus hijos habían huido para defender la República durante la guerra, principalmente hacia Madrid. Fueron cinco portavoces de los 360 asesinados/ejecutados y las casi 3.000 presas y presos segovianos que se homenajean en el Memorial Democrático. Las canciones de Luisa y Cuco Pérez, nietos del maestro exiliado Cesáreo de la Cruz, fueron el mejor colofón para una noche inolvidable, reivindicativa y emotiva.
La cárcel de Segovia que fue lugar destacado de encierro de presas (1946-1956) y presos (1969-1977) de múltiples procedencias, por lo que su trascendencia desborda los límites provinciales. Padecieron cautiverio en Segovia, entre otras muchas personas, María Salvo, Juana Doña, Manolita del Arco, Tomasa Cuevas, así como Marcelino Camacho, Pere Ardiaca, Gerardo Iglesias… personas con diversas ideologías -desde republicanos católicos conservadores hasta anarquistas ateos-, considerados por el régimen franquista como la Anti-España al no aceptar el golpe de Estado del 18 de julio de 1936 contra la legalidad democrática de la II República, cuyo fracaso provocó la guerra y dio pie a una dictadura militar de cuatro décadas, contra la que continuaron luchando en la clandestinidad y en el exilio miles de personas.
Con ello, el historiador remarcó que el Memorial Democrático de Segovia debe ser un orgullo para toda la ciudadanía segoviana, precisamente cuando se cumplen 50 años de la muerte de Franco, siendo muy necesario el conocimiento de uno de los aspectos más cruentos de la dictadura, sus sistemas concentracionario y penitenciario. Vega Sombría incidió en la idoneidad de que el Ayuntamiento fije un horario de apertura al público para visitar el Memorial.