Salud Pública de Aragón ha determinado, tras los análisis del agua realizados en diferentes zonas del cauce del río Queiles, que el origen del brote de gastroenteritis detectado en Tarazona y otros pueblos del entorno no está en la Comunidad aragonesa sino en la de Castilla y León. Fruto de la segmentación realizada en el río Queiles, los análisis realizados han detectado la presencia del protozoo Cryptosporidium, causante del brote, aguas arriba de Aragón, en Castilla y León, según informó el departamento de salud aragonés en una nota de prensa. El brote de gastroenteritis de Tarazona tiene contabilizados 498 casos hasta ayer por la mañana.
Ahora se sigue trabajando para que tanto Tarazona como las localidades de su entorno puedan volver a la normalidad en el menor plazo de tiempo posible, según informa Efe. Los resultados obtenidos en los análisis de aguas de río Queiles, ordenados por el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil y financiados por el departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón, han detectado la presencia de ooquistes del protozoo Crystosporidium antes de que el río entre en territorio aragonés.
La hipótesis que gana más peso es que el foco de contaminación se encuentre fuera del territorio aragonés, informan en la citada nota. Desde ayer, la Dirección General de Salud Pública del Ministerio de Sanidad coordina todas las actuaciones, junto con el Ministerio del Interior y las comunidades de Castilla y León, Aragón y Navarra, dado que esta última capta aguas del río Queiles para el llenado del embalse de la Dehesa, que abastece a varias localidades de la Comunidad Foral de Navarra. Durante la tarde de ayer estaba prevista la primera reunión de coordinación convocada, convocada por la Dirección General de Salud Pública del Ministerio de Sanidad.
El protozoo Cryptosporidium es el causante del brote de gastroenteritis que se declaró el fin de semana del 9 y 10 de septiembre en Tarazona. Este protozoo se presenta en el medio acuático en forma de ooquiste y no es posible detectarlo con los análisis de control rutinarios. Desde el 11 de septiembre, los habitantes de Tarazona no pueden usar el agua para beber ni lavarse los dientes y deben hervirla al menos durante 10 minutos para cocinar. Esta restricción se aplica desde el jueves 21 de septiembre a las localidades de Torrellas, Novallas y Los Fayos tras detectarse la presencia del protozoo en el Queiles.