La Policía Judicial de la Guardia Civil continúa sus investigaciones para esclarecer el caso de la joven de Coca de unos veinte años que apareció hacia las 13 horas del sábado en las inmediaciones del antiguo depósito de Arévalo, semidesnuda y conmocionada.

En la tarde de ayer la joven continuaba ingresada en el Hospital Nuestra Señora de Sonsoles de Ávila, del Complejo Hospitalario de Ávila, a la espera de completar todas las pruebas médicas y las forenses que requiere una situación como la que se ha producido. De hecho, el protocolo de actuación en este tipo de situaciones es muy estricto y contempla una serie de pautas a seguir para una acción coordinada entre los equipos sanitarios y los profesionales de los servicios forenses con el fin de garantizar la protección integral de la posible víctima.

A la vez también coordinado todo ello con la investigación policial que realiza la unidad de Policía Judicial de la Guardia Civil de la Comandancia de Ávila. Con el fin de confirmar si la joven ha sido víctima de una agresión sexual, algo que no se confirmará mientras no estén los informes médicos y forenses pertinentes, según indicaron a este periódico fuentes de la Subdelegación del Gobierno, que confirmaron también que las diligencias siguen abiertas y que no se había presentado hasta el día de ayer ninguna denuncia.

La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, ha señalado este lunes que "de momento" el suceso no está calificado como agresión sexual. "No hay indicios y la investigación continúa en marcha por si pudiera aparecer un dato relevante", ha añadido poco después de presentar en Valladolid los premios Meninas y una campaña para erradicar la violencia de género en locales de ocio y establecimientos hosteleros.