La nadadora burgalesa Marta Fernández, en los 50 metros braza SB3, y el relevo 4x100 mixto libres 49 puntos dieron este miércoles dos nuevas medallas a la delegación española presente en los Juegos Paralímpicos de París tras conseguir sendos bronces que acercan a la natación a sus cifras de Tokyo 2020.
La Défense Arena volvió a ver un buen día para el equipo español, que volvió a meter varios finalistas y que logró subir al podio de nuevo con la que se perfilaba como mejor apuesta, la castellano-leonesa, y, de nuevo, con un relevo como ya hiciese hace dos días con el 4x100 estilos mixto. Éxitos que ayudaron a España a superar la barrera de las 30 medallas en Paris 2024, 13 de ellas en la piscina, a una de las logradas hace tres años en Tokio, octava en el medallero por países de este deporte y todavía con buenas opciones en lo que queda de competición de mejorar esa cifra.
Y en 2021, Marta Fernández reinó entonces en el Centro Acuático de la capital japonesa en los 50 braza SB3 con un registro de 58.21, ligeramente más rápido al que firmó en la defensa de su corona (58.63) en una prueba donde el nivel ha subido ostensiblemente como demostró la italiana Monica Boggioni, que heredó el trono de la española con nuevo récord paralímpico (53.25).
La campeona fue inalcanzable para la burgalesa, que sí peleó por la medalla de plata con la brasileña Patricia Pereira, con la que libró un duelo hasta la pared, que se decidió a favor de la nadadora sudamericana por un pequeño margen de 32 centésimas.
La castellano-leonesa confesó que ya está notando el cansancio de su tercer día seguido nadando, pero con todo sumó sexta medalla paralímpica, tercera en La Défense, las mismas que en su debut en la capital japonesa, a falta todavía de ver si puede lograr un oro que sí consiguió en 2021.
Y el cierre en la piscina francesa trajo la otra alegría del día, gracias a un relevo, una especialidad que ha dado ya dos medallas en estos Juegos y que ha puesto fin a un sequía que se arrastraba desde la cita de Pekín en 2008.
Esta ocasión fueron el cuarteto formado por José Ramón Cantero, María Delgado, Emma Feliú y Kike Alhambra el que subió al podio después de una gran final donde fueron los dos últimos los que remontaron hacia el bronce después de dos buenas postas de sus compañeros. Para Cantero y Feliú fue su primera medalla paralímpica, mientras que para Alhambra fue la segunda tras el bronce en 100 mariposa y para Delgado la cuarta, segunda en La Défense tras el bronce en 100 espalda.
Durante la jornada se nadaron otras finales con la zaragozana María Delgado finalizando cuarta, a siete décimas del podio, en los 100 metros libres S13, prueba en la que en la categoría masculina Iván Salguero ha sido séptimo. Nahia Zudaire e Íñigo Llopis fueron séptima y octavo respectivamente en los 400 libres S8, mientras que Sarai Gascón fue sexta en la final de los 100 libres S9, una prueba en la que había subido al podio desde Londres 2012.