Por segundo año consecutivo se ha roto la tradición de que el Premio Castilla y León de las Letras lea el discurso en nombre de los galardonados. El fallecimiento el pasado año de Fernando Sánchez Drago días antes de recoger el reconocimiento obligó a que fuera su hija la que pusiera voz al texto, y en esta ocasión, Fernando Arrabal, Premio de las Letras 2023, no pudo asistir a sus 91 años desde su domicilio en París a la gala. Ocupó esta responsabilidad en su lugar el catedrático de la Universidad de Burgos René Jesús Payo, Premio Castilla y León 2023 en la categoría de Ciencias Sociales y Humanidades, que defendió la generosidad histórica de Castilla y León con España. «Castilla y León es el corazón de España. Un corazón que ha irrigado sangre a nuestro país, de manera generosa, aunque en algunos momentos de su historia esto haya supuesto que quedara exhausta». Una intervención en la que puso en valor la aportación de la Comunidad a «definir la médula del ser hispano»

El texto de Payo, enmarcado entre versos de Machado y Gamoneda, sirvió para poner voz a sus seis compañeros premiados, a los que glosó como «mujeres y hombres excepcionales» y «ejemplos de trabajo, entrega, constancia, valor y genialidad». Junto a Rene Payo, también fueron reconocidos Margarita Moráis con el premio de los Valores Humanos y Sociales; el de las Letras recayó en Fernando Arrabal, cuyo galardón fue recogido por el alcalde de Ciudad Rodrigo (Salamanca), Marcos Iglesias, en recuerdo del municipio donde el escritor pasó su infancia y un teatro lleva su nombre; Eva Hernando recibió el de Investigación Científica y Técnica e Innovación; la cirujana taurina, Marta Pérez López, el de Tauromaquia; el Museo Art Nouveau y Art Déco Casa Lis, el de las Artes, y Belén Sánchez Jiménez, el del Deporte.

Por último, Payo quiso hacer una defensa «de la libertad y la lucha contra cualquier tiranía», y aprovechó sus palabras finales para denunciar «lo absurdo de la violencia de la guerra».