En un espectacular duelo entre velocistas, el belga Tim Merlier (Soudal Quick Step) se impuso ante Jonathan Milan en la decimoctava etapa del Giro de Italia disputada a través de 178 kilómetros entre Fiera di Primiero y Padua, jornada de transición en la que mantuvo la maglia rosa el esloveno Tadej Pogacar.
Frente a frente en la recta de meta, en un duelo disputado desde lejos, Tim Merlier (Wortegem Petegem, 31 años) fue el más rápido y hábil a la hora de lanzar el ataque definitivo, por lo que se apuntó su segundo triunfo en la presente edición, después del que logró en Fossano.
Merlier, con 43 victorias en su palmarés, marcó en meta un tiempo de 3h.45.44, a una media de 47,312 km/hora, impidiendo por escaso margen la cuarta etapa del gigante y maglia ciclamino Jonathan Milan (Bora), mientras que la tercera plaza fue para el australiano del Alpecin Kaden Groves. El colombiano Fernando Gaviria (Movistar) entró a la pelea, pero solo pudo ser sexto.
En la general, tranquilidad, sin cambios. Etapa intrascendente en espera de la jornada de montaña del sábado en Monte Grappa. Pogacar solo apareció por el podio a recoger sus habituales premios protocolarios. Pasó el día, manteniendo las diferencias, 7.42 minutos sobre el colombiano Daniel Felipe Martínez (Bora) y 8.04 respecto al británico Geraint Thomas (Ineos). El primer español es Juanpe López, en el puesto 32.
Escapada controlada
Después de dos días de calvario en las montañas de los Dolomitas, los esprinters volvían a la vida con una jornada propicia para ellos. Jornada con una única dificultad, y al principio de la etapa, el alto de Lamon (4a. Después de muchos ataques en el pelotón, y ya bajo la lluvia, se formó una inocua escapada con 3 italianos, Maestri, Pietrobon y Fiorelli, y el danés Honoré.
Ninguna inquietud para el pelotón a un mundo de la llegada. El líder y el UAE encantados con la inciativa, los hombres del podio, caso Ineos de Thomas y Bora de Dani Martínez, lo mismo. Eran los equipos de los velocistas los que debían ponerse el mono de trabajo si querían resolver al esprint en la ciudad universitaria de Padua.
El Lidl de Jonny Milan y el Soudal de Merlier, hubieron de ponerse a tirar del pelotón para evitar excesos en la fuga, siempre bajo control, ideal para que Pogacar y sus muchachos se limitaran a dejarse llevar. El cuarteto en fuga aumentó a 5 unidades con la incorporación de Edoardo Affini, pero todos juntos claudicaron a 10 de meta, si bien estuvieron a tiro de piedra mucho antes. Fueron 160 km de fuga.
Milan remonta pero Merlier le roba la etapa
Una etapa diferente comenzó en las inmediaciones de Padua, la de verdad, cuando se activó el protocolo de aproximación y colocación para que los más rápidos del pelotón se jugaran el honor de levantar los brazos. Soudal y Lidl llevaban las cartas ganadoras, los demás las opciones de derribar la lógica.
A 65 por hora, ya en las calles de Padua, el Alpecin de Kaden Groves puso a todos sus efectivos en cabeza, una declaración de intenciones contestada por el Ineos, empeñado en discutir las plazas de vanguardia, así como el Soudal, con Alaphilippe forzando la máquina, revolviendo el grupo.
En la recta de meta, la revolución. Lidl lanzó a Milan para que el italiano rematara la faena con éxito, pero Merlier estuvo más inspirado a la hora de sacar su carta. El belga apareció por la derecha para firmar el doblete. Final igualado, pero tampoco hizo falta la foto de llegada. 3-2 para Milan ante Merlier, y solo les queda el esprint de Roma del próximo domingo.
Este viernes tendrá lugar la decimonovena etapa entre Mortegliano y Sappada, con un recorrido de 157 kilómetros. La segunda parte de la carrera se animará con tres dificultades, el Passo Duron (2a, 6,9 km al 5,8 por ciento), el Sella Valcalda (3a, 8,9 al 3,7) y la Cima Sappada (2a, 10,7 km al 4,4), con el alto puntuable a 7 km de meta.