La retirada inesperada de Iván Gómez, el corredor de la provincia más prometedor, ha evidenciado la crisis de nuevos talentos que padece el ciclismo segoviano. Los tiempos de Pedro Delgado quedan muy lejos, pero del pelotón segoviano ya no salen siquiera segundos espadas desde hace más de una década.
«Es muy difícil», recuerda Pablo de Pedro, uno de los últimos que lo consiguió. «Hay que tener mucha ilusión, muchas ganas, cuando ya conoces más ese mundo tienes que seguir con esa ilusión y ahora mismo hay mucha competitividad. Si tienes 100 licencias, el cinco por ciento puede llegar, pero si tienes 20 o 30 es mucho más difícil. Luego hay algunos que tienen calidad y que no se atreven a probar por los estudios, y las redes sociales tampoco ayudan. En las redes sociales, los profesionales solo muestran imágenes buenas y no se ven imágenes de sacrificio, de corredores con la boca llena de babas y sin poder casi respirar. Por eso, los chavales se lo toman de otra manera, no piensan tanto en ser profesionales y casi buscan más otra salida laboral como influencers. Pero tarde o temprano tendremos que sacar algún otro [ciclista profesional]. Estamos trabajando en que haya más chavales en las escuelas y que les guste».
De Pedro es el actual codirector deportivo de la escuela del Club Ciclista 53x13, formada por 24 corredores -incluidas tres chicas- con edades comprendidas entre los seis y los 14 años. «En los dos últimos años se ha duplicado el número de miembros del equipo, y el objetivo para la próxima temporada es llegar a 30 y tener un equipo femenino completo», señala De Pedro, quien aclara que en esta fase priorizan la formación sobre aspectos competitivos. «En el inicio de temporada practicamos otros deportes relacionados como el senderismo, en el que se aprende a valorar el entorno natural, el compañerismo, la sociabilización, el conocimiento a través de una actividad saludable y la amistad. En la siguiente parte aprendemos destreza y habilidad con la bicicleta a través de gymkanas y juegos de habilidad en circuitos cerrados y con rutas de montaña en MTB para aprender a gestionar obstáculos en caminos para una mayor seguridad. Y la última parte de la temporada va mas encaminada a la seguridad vial, el respeto de las normas, la protección y la prevención en circulación, el aprendizaje de la destreza y la habilidad para rodar a velocidades altas en grupo, relevos y en buena formación lineal. Todo con rutas y entrenos en bicicleta», explica De Pedro.
El reto con los 'mini Pericos'El 53x13 se ha quedado prácticamente solo en Segovia en esta labor de formación de los que empiezan en el ciclismo. El Club Deportivo Caloco de El Espinar, un icono de las escuelas ciclistas en Segovia, no tiene niños en este momento. «Hay niños que montan pero federados ninguno», admite su presidente, Juan Manuel Gea. «Hubo escuela porque había alguien que tiraba de ella. Salía con los chicos y los chicos se sentían que estaban acompañados por un monitor o una persona que les dirigía y les enseñaba. Y creo que la clave es que se hizo un grupo. Como en todos los deportes, pesa mucho el factor social. Los chavales tenían un grupo en el que se relacionaban en torno a la bici», reflexiona.
El Club Deportivo Caloco ha cumplido 40 años en este 2023 y busca «futuro» y «equilibrio». «Creo que el mayor hándicap que tenemos es no tener una base. «Mi formación, mi ilusión y mi trabajo es el deporte porque soy profesor de Educación Físico, pero ahora mismo no vivo de continuo en El Espinar y he buscado gente que coja ese testigo pero no es fácil. Siempre digo que en un campo de fútbol te puedes llevar un pelotazo, pero salir con la bicicleta tiene unos riesgos añadidos», remarca Gea, al tiempo que no puede evitar sentir nostalgia de tiempos pasados: «De todos los grupos que hemos tenido en la escuela, el que más y el que menos nunca se ha llegado a desvincular de la bicicleta. Chicos que empezaron con ocho o nueve años en la escuela y ahora tienen 23 o 24 y siguen montando con nosotros en el club. Y gente con más años. Tengo claro que Perico Delgado ha salido uno pero los hábitos saludables y una práctica que marca tu estilo de vida sale de las escuelas».
En el medio rural se ha desinflado. Tampoco el Club Ciclista de Navas de Oro y la Unión Ciclista Cantimpalos atraviesan sus mejores días. «En Cantimpalos hay dos o tres chavales, pero con la subida que ha habido en Segovia digamos que la situación es razonablemente buena. En cuanto a número de pruebas tenemos bastantes. En proporción seguramente seamos la provincia de Castilla y León que más tiene. Quizás habría que bajar incluso», destaca el delegado provincial de Ciclismo, Antonio Barrio, que pone el acento en el auge de disciplinas como el BTT. «Ahora mismo es difícil compatibilizar el ciclismo profesional con los estudios», concluye.