Las vallas publicitarias instaladas en varios lugares de la ciudad han cambiado su función promocional por la de contenedores para la expresión artística. El proyecto 'Insurrecta' que realizó el artista segoviano Gonzalo Borondo con ocasión del Quinto Centenario de la revuelta de Los Comuneros hace tres años abrió la puerta a emplear estos espacios antes utilizados para la publicidad como marco para iniciativas culturales que transforman el paisaje urbano en museos al aire libre.
Tras el éxito de la iniciativa de Borondo, el Ayuntamiento de Segovia quiere mantener este uso dedicándolo en esta ocasión a la fotografía, con un proyecto vinculado a la historia de la ciudad en los últimos cien años. Bajo el título 'Museo a cielo abierto', la concejalía de Cultura ha encargado la primera exposición de esta iniciativa al investigador y divulgador fotográfico Aku Estebaranz, que ha realizado la selección de las 20 fotografías que componen la muestra «Segovia, un patrimonio en imágenes» que podrá verse en los próximos meses en las vallas publicitarias de la capital.
Creador e impulsor del blog Arqueologíaenimagenes - com más de 50.000 visitas desde su puesta en marcha- Estebaranz ha realizado un trabajo en el que ha tratado de vincular las fotografías que pueden verse en esta exposición con los espacios en los que se integran. De este modo, el visitante puede comprobar la calidad del trabajo de maestros locales de la fotografía y de los pioneros de esta disciplina artística que dejaron su mirada en Segovia, dejando así un testimonio documental, sociológico y antropológico tan importante como poco conocido.
El comisario de la muestra señala que el proceso de selección de las imágenes ha estado condicionado a las exigencias técnicas de las propias fotografías, donde las ampliaciones necesarias para su reproducción en tamaños que en la mayor parte de los casos alcanzan los 25 metros cuadrados de superficie. Así, señala que las imagenes elegidas «fueron realizadas cuando la fotografía estaba nacioendo, por lo cual no había una uniformidad en los formatos y cada fotógrafo empleaba el que más le interesaba o el más sencillo de utilizar». «Hemos intentado mantener la calidad estética de las fotografías, lo que ha obligado a reencuadrarlas en muchos casos para adaptarlas a los nuevos formatos sin perjudicar el entorno artístico que plasma su autor".
Pese a ello, los condicionantes técnicos han impedido que no se haya podido elegir ninguna fotografía que originalmente tuviera un formato vertical «porque no soportaban los rangos de ampliación que necesitábamos, y por ello hemos perdido grandes fotografías de temática segoviana, por ese inconveniente».
En la exposición se pueden ver trabajos de grandes nombres de la fotografía local como Jesús Unturbe o Tirso Unturbe, y de quienes admiraron Segovia a través del objetivo de su cámara como Antonio Passaporte (Loty), Roberto Kallmeyer, Jean Laurente, Jules David-Cavz, Otto Wunderlich o Jules Sans Vandermans.
En cuanto a la temática de las fotos, la exposición tiene un marcado carácter documental, con imágenes que narran aspectos de la vida cotidiana en la ciudad en el primer tercio del siglo XX. Sobre este aspecto, Estebaranz ha señalado que la intención de la muestra ha sido «ligar las imágenes a la historia de la ciudad y su relación entre el mundo rural y el mundo urbano», con ejemplos como el entorno de la ermita del Cristo del Mercado, la Academia de Artillería o el entorno de los grandes monumentos de la ciudad desde una perspectiva distinta.
Para Estebaranz resulta difícil poder elegir una de las veinte fotografías de la exposición, teniendo en cuenta que la elección previa ha dejado fuera muchas otras de gran interés. Pese a ello, valora el carácter artístico y documental de un paisaje del fotógrafo Lauren con la plaza de toros en primer término y otra de Wunderlist con un grupo de danzantes de Cantalejo con sus trajes folclóricos. De igual modo, destaca el retrato de un zaga" de pastores realizado por el segoviano Jesús Unturbe, en el que subraya la profundidad de la mirada del chaval «como si te estuviera interpelando».
Una vez concluida esta exposición, que podrá verse hasta noviembre de 2025, Estebaranz expresa su deseo de que este novedoso espacio expositivo siga apostando por la fotografía como expresión artística, y propone la combinación de fotografía histórica abierta a autores como Manuel Riosalido o José María Heredero junto a otros fotógrafos locales contemporáneos, que permitirá contar con una visión más amplia de los paisajes segovianos y las técnicas con las que los fotógrafos los han plasmado.