Segovia invertirá 180.000 euros para evitar vertidos al río

Gonzalo Ayuso
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El mal funcionamiento de algunos aliviaderos provoca el desbordamiento de aguas residuales, incluso sin lluvias, y sanciones de la Confederación Hidrográfica del Duero

Aliviadero de la red de saneamiento de Segovia en el río Eresma. - Foto: Rosa Blanco

El Ayuntamiento de Segovia prevé invertir 180.000 euros en obras de reforma, mejora y equipamiento de tres aliviaderos del sistema de saneamiento de la ciudad para mejorar su comportamiento y evitar desbordamientos de aguas residuales incluso cuando no se producen lluvias, lo que permitirá la reducción de la contaminación del río Eresma y otros cauces y, en consecuencia, las sanciones recurrentes de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) por ese motivo.

El concejal de Obras, José Luis Horcajo, ha explicado que la intención del gobierno municipal es llevar a cabo la inversión este mismo año, ya que el proyecto está redactado a falta de la actualización de algunos precios.

Horcajo ha destacado que estas mejoras, además de evitar las sanciones de la CHD, tendrán una repercusión directa en el mantenimiento de la biodiversidad de los cauces del municipio.

El edil del PP prevé que esta inversión, junto a la reciente instalación de bombeo en el barrio incorporado de Zamarramala, cuya zona norte vertía sus aguas residuales directamente a una cacera situada junto al camino de La Lastrilla, resolverá los problemas más importantes de vertidos.

Precisamente, el Ayuntamiento ha acordado recientemente el pago de una multa de 3.000 euros a la Confederación por el «vertido continuado de aguas residuales sin depurar al río Eresma» el pasado mes de noviembre en la zona de Los Lavaderos. La multa inicial era de 5.000 euros pero el consistorio se ha ahorrado 2.000 euros al reconocer voluntariamente su responsabilidad y realizar el pago de la sanción antes de la resolución del expediente, renunciando, además, a presentar  un recurso en vía administrativa.

En el caso del vertido a la cacera situada junto al camino de La Lastrilla, en Zamarramala, el Ayuntamiento pagó el pasado otoño una multa de 2.000 euros y, en esa ocasión, la Confederación exigía que pusiera remedio para evitar la contaminación de aguas  subterráneas.

Informe. A raíz de la sanción de la CHD por el vertido de noviembre en la zona de Los Lavaderos, un  ingeniero municipal, responsable del servicio de Aguas, elaboró un  informe técnico que indica que la Comisaría de Aguas inició el expediente sancionador el pasado mes de abril, cuando se lo comunicó al Ayuntamiento para que presentase alegaciones, y las pruebas oportunas si así lo consideraba.

En ese informe, el responsable de este servicio municipal reconoce un vertido el 6 de noviembre de 2023 «en ausencia de precipitaciones», ya que la Confederación solo autoriza «el desvío de aguas residuales no tratadas o parcialmente tratadas... por alivio en condiciones de lluvia», una vez superada la capacidad de tratamiento de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de la ciudad y con un coeficiente de dilución mínimo de 1/6. Durante esa jornada no se registraron precipitaciones de lluvia, por lo que la dilución era nula.

La inspección realizada ese mismo día confirmó la pérdida de capacidad del colector por acumulación de piedras en el fondo del mismo. Eso motivó que la lámina de agua se elevara considerablemente y se produjeran vertidos al río a través del aliviadero.

Se da la circunstancia de que en ese tramo del colector la pendiente es muy reducida, por lo que la circulación del caudal es baja y eso facilita la decantación de partículas sólidas arrastradas.

Por otra parte, los caudales de ese emisario han crecido de manera importante debido a los crecimientos urbanísticos de los últimos años, sobre todo por la conexión de los municipios de La Lastrilla y de San Cristóbal de Segovia para la depuración de aguas negras en la EDAR del municipio.

Comunidad de vertidos. Por esa razón, el Ayuntamiento de Segovia trabaja en la creación de una Comunidad de Vertidos a integrar por los tres municipios, que asuma de manera solidaria tanto la responsabilidad por los incidentes que se produzcan como las inversiones necesarias para poner fin a vertidos, ya que se trata de un punto de la infraestructura compartido.

Además, tras conocer el vertido, el Ayuntamiento limpió el colector y la cámara de alivio para conseguir disminuir el nivel del agua, y el aliviadero ha sido equipado con una placa para retener flotantes y reducir la contaminación.

Por otro lado, ha solicitado una subvención con cargo a fondos europeos para digitalización y mejora de la eficiencia del ciclo urbano del agua.