Disposición al diálogo para avanzar en las reivindicaciones y necesidades que arrastra Castilla y León. Este es el mensaje lanzado por el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, y el nuevo delegado del Gobierno en la Comunidad, Nicanor Sen, tras su primera reunión oficial celebrada este martes después de la toma de posesión la pasada semana en sustitución de Virginia Barcones. Ambos reafirmaron en este encuentro su apuesta por el diálogo entre ambas partes ante las necesidades autonómicas, expresadas ya por carta al Ejecutivo central. La reunión institucional se desarrolló en un ambiente de «cordialidad», con voluntad de colaboración entre ambas administraciones y con el ofrecimiento de diálogo para la resolución de los asuntos que afectan a los castellanos y leoneses, según informaron fuentes de la Junta y de la Delegación del Gobierno.
En este primer encuentro entre el presidente y el nuevo delegado, que se prolongó durante una hora, Fernández Mañueco recordó a Sen que ha trasladado las reivindicaciones por carta a los distintos ministerios del Gobierno de España el pasado mes de noviembre. Así, en materia de infraestructuras, señaló la necesidad de acometer las autovías y carreteras pendientes, recuperar las frecuencias de trenes, el impulso de polígonos y centros logísticos, así como la implicación del Ejecutivo central para extender la banda ancha al cien por cien del territorio de Castilla y León, según informa la Agencia Ical.
El presidente autonómico incidió en la necesidad de contar con un nuevo modelo de financiación, que aporte recursos suficientes; la flexibilización del Plan Estratégico de la PAC; la importancia de una EBAU única que evite la discriminación a los alumnos; una fiscalidad específica para las zonas rurales, como medida para luchar contra la despoblación, y en la búsqueda de soluciones para el problema nacional que supone la falta de médicos.
Por otro lado, remarcó el compromiso de colaboración de la Junta en la lucha contra la violencia machista y en otros ámbitos específicos de la Delegación del Gobierno, como la seguridad y la protección ciudadana. Finalmente, desde una defensa firme de la democracia, el Estado de Derecho y la Constitución, Fernández Mañueco expresó la oposición del Gobierno autonómico a la amnistía, y el rechazo a los privilegios económicos de unas comunidades sobre otras.
Sen, por su parte, calificó de «muy positiva» la reunión a la vez que se comprometió a dar trasladado a los responsables de los correspondientes ministerios. «El diálogo debe ser una máxima para llegar a acuerdos con otras instituciones con las que es necesario colaborar, como es el caso de la Junta de Castilla y León».
Críticas de Suárez-Quiñones
Antes de la reunión, el consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, lamentó durante un acto en León que el «único problema» de Nicanor Sen es que representa a un Gobierno «en el que el diálogo parece que no es una de sus señas de identidad». No obstante, valoró que Nicanor Sen es una persona que «tiene una personalidad dialogante».