Con la perseverancia que impulsa el vínculo familiar, los herederos del arquitecto Silvestre Manuel Pagola comienzan a ver la luz al final del túnel en el proceso que iniciaron hace casi ya un año para conseguir que el Ayuntamiento de Segovia distinga al autor de algunos de los más emblemáticos edificios construidos a principios del siglo XX en la ciudad y del diseño de calles y plazas de la ciudad.
Así, la pasada semana, el alcalde José Mazarías recibió en la Casa Consistorial a una representación de la familia Pagola con la que adquirió el compromiso de promover en los próximos meses la declaración de Hijo Adoptivo de la ciudad conforme a lo establecido en el Reglamento Municipal de Honores y Distinciones que determina las especificaciones de esta distinción en sus artículos 32 a 34.
En la entrevista, el alcalde expresó su intención de promover la instrucción del expediente con interés y ha lamentado que, hasta ahora, no se haya producido este merecido reconocimiento. Además, ha puesto a su disposición los archivos municipales para buscar y estudiar los trabajos realizados por este arquitecto y, si hubiera material suficiente, llevar a cabo una exposición en la Alhóndiga u otra instalación municipal.
Para la familia Pagola, la entrevista con el alcalde ha supuesto un punto de inflexión crucial para conseguir el objetivo final del reconocimiento a la figura del arquitecto y urbanista nacido en Bilbao, pero que desde que llegó a Segovia como arquitecto municipal en 1923 inició una historia de amor con la ciudad que se ha extendido también en su ámbito familiar.
Paloma Prada Pagola, que junto a su prima Raquel Pagola han promovido esta iniciativa, expresaron su profundo agradecimiento a la acogida de esta iniciativa por parte del Ayuntamiento, y expresó su confianza en que la tramitación administrativa de la solicitud permita llevarla a un pleno municipal para su aprobación en este mismo año, cumpliendo así el deseo de Juan Manuel, el único hijo vivo del arquitecto que a sus 91 años "está muy emocionado con poder estar presente en un acontecimiento único para toda la familia"
Silvestre Manuel Pagola (Bilbao, 1892-Segovia, 1943) fue nombrado arquitecto municipal de la ciudad en 1923. Diez años después se instaló en Segovia y aquí viviría hasta su fallecimiento en 1943. Su trabajo y su estilo son visibles en varios puntos y edificios de la ciudad. Llevan la firma de este arquitecto la que fuera vivienda del empresario Nicomedes García, y sede de su fundación, el inmueble situado en la plaza de la Rubia, esquina a calles Serafín y Colón, o la ampliación de la que fue Clínica Gila, en la calle San Francisco. Pagola fue también autor del Plan de Mejoras Urbanas de Segovia y está considerado uno de los arquitectos más importantes de su época.
De concretarse este nombramiento, Pagola formará parte de la nómina de personalidades nacidas fuera de Segovia que han recibido la distinción. Según los datos que figuran en la web municipal, el primero en recibir esta distinción fue el historiador Joaquín Pérez Villanueva en enero de 1950, y a partir de esa fecha, sólo 15 personas más han sido acreedores de esta distinción (ver cuadro adjunto).
Entre las más destacadas en esta nómina, figuran el fundador de Radio Segovia Antonio Hernández Asiaín, promotores culturales y sociales como Jaime Alpens Gasparini - impulsor de la romería del Malangosto y de los intercambios culturales entre Segovia y Francia-, José Diviú - fundador de la Ronda Segoviana y revitalizador del carnaval segoviano- o el padre Tomás Gallarta - baluarte de la integración del pueblo gitano en Segovia-
Más recientemente, la folclorista Llanos Monreal - integrante de Nuevo Mester de Juglaría- y Bert Van Malderen - CEO de la empresa Drylock- han sido distinguidos con este galardón, que recompensa a todos aquellos que sin ser nacidos en Segovia, han conseguido por su trabajo y esfuerzo grandes logros para su ciudad de adopción.