La plantilla de la empresa biotecnológica Bioammo, ubicada en el municipio de Santa María la Real de Nieva y pionera en el desarrollo y fabricación de munición bio-compostable para caza y tiro deportivo, está sujeta a un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) que afecta a 36 trabajadores desde el pasado 24 de enero y se debe a circunstancias «de causa mayor», concretamente a problemas de suministro de pólvora en el mercado internacional por la guerra que mantiene Israel en Palestina.
El ERTE, como medida temporal para el mantenimiento del empleo, se presentó el 23 de enero en la Oficina Territorial de Trabajo de la Junta, con vigencia desde el día siguiente para un periodo inicial de cinco meses. En este caso no es preceptiva una resolución de Trabajo ya que sus condiciones son fruto de un acuerdo entre los trabajadores y la dirección. Cuenta, además, con el informe correspondiente de la Inspección de Trabajo.
Fuentes sindicales han explicado que la empresa ha alegado problemas de suministro que han condicionado la producción, lo que estaba afectando a su liquidez, ya que se habían producido retrasos en el pago de algunas nóminas.
Con la puesta en marcha del ERTE, se prevé que los trabajadores comiencen este mes de marzo a cobrar la prestación por desempleo.
El presidente y fundador de Bioammo, Enrique López-Pozas, ha explicado que se trata de una cuestión puntual por la escasez global de pólvora. Así lo han recogido medios internacionales como Newsweek, que desde sus páginas de Economía alertaba de que desde el pasado 1 de enero están aumentando de forma importante los precios de este producto debido a las guerras tanto en Gaza como en Ucrania, lo que ha generado «una demanda sin precedentes». Recientemente, un responsable de la empresa alemana de armamento Rheinmetall hacía un análisis para explicar el «cuello de botella» existente en el mercado mundial de pólvora por la alta demanda para las cargas propulsoras de los proyectiles de artillería.
López-Pozas confía en que la situación esté en vía de resolverse. «Puede ser una semana o dos meses» ha comentado en relación a la producción y puesta en el mercado de pólvora, dando a entender que se puede reducir el periodo de vigencia del ERTE. Ha añadido, además, que a las tres semanas de iniciarse el expediente «ya hemos recuperado al 33% de la plantilla, la fábrica está funcionando y está en marcha, cualquiera lo puede comprobar».
Desde CCOO, sindicato al que pertenecen los tres delegados de personal de esta empresa, han informado, sin embargo, de que inicialmente el acuerdo recoge que sean dos personas las que trabajen durante unas horas a la semana realizando tareas de mantenimiento y puesta en funcionamiento de la maquinaria durante un tiempo reducido, así como de vigilancia de las instalaciones. Puntualmente, señalan las mismas fuentes, se ha planteado la presencia en sus puestos de trabajo de una parte de la plantilla en alguna jornada suelta para dar salida a un pedido pendiente.
Condiciones. El sindicato considera que los trabajadores han conseguido un buen acuerdo en el ERTE con la dirección, que ha estado receptiva a sus demandas, como mantener íntegras las vacaciones e incluso ayudas económicas de la empresa a una minoría de trabajadores que no tiene derecho a la prestación contributiva por desempleo.
Dentro del programa de concesión de incentivos regionales que otorga el Gobierno central, Bioammo recibió hace un año una subvención de 608.945 euros para una inversión en un proyecto cuyo presupuesto superaba los 3 millones de euros e implicaba la creación de 15 puestos de trabajo. La empresa ha sido galardonada con el premio CEPYME al Mejor Proyecto Emprendedor del año 2021 y su fundador recibió en 2022 la Gran Cruz al Mérito Agrario, Pesquero y Alimentario de manos del ministro Planas.