El alcalde de Segovia, José Mazarías, ha renovado este viernes el Voto de la ciudad de Segovia a San Roque, una tradición que se remonta a finales del siglo XVI, cuando los segovianos estuvieron asolados por la peste bubónica, que causó muchas bajas.
Mazarías ha estado acompañado por varios miembros de la corporación municipal en un acto que, como es habitual, se ha celebrado en la Iglesia de San Millán, donde se venerauna imagen de San Roque, abogado contra la peste, que anteriormente se encontraba en una ermita cercana ya desaparecida.
Ha cumplido con la tradición y ha pedido la intercesión de San Roque ante numerosos fieles segovianos que, tras la eucaristía, han participado en la procesión con la imagen del santopor las calles del barrio de San Millán.
La tradición se repite cada 16 de agosto con los actos que se celebran en San Millán. - Foto: DSSegún Comenares, cronista de Segovia en esa época, la peste llegó a Segovia en febrero de 1598 y enseguida se comprobó que era muy contagiosa y con terribles síntomas.
Cuenta este cronista que la falta de pan, por la mala cosecha, hizo que la enfermedad se propagara más rápido en el verano, cuando las camas para los enfermos de peste se extendieron hasta el campo por falta de sitio en los hospitales. Las autoridades de la ciudad votaron la festividad de San Roque, en agosto, co la celebración de una misa mayor en la Catedral y en el ofertorio, el teniente y el decano del consistorio "votaron de celebrar la festividad de San Roque, cada año en diez y seis de agosto, asistiendo en forma de ciudad a la misa mayor en la Catedral…". El obispo confirmó el voto y de forma milagrosa se produjo una gran mejoría aunque se estima pudieron morir hasta 12.000 personas, según Colmenares.
Desde entonces el Ayuntamiento de Segovia renueva el Voto a San Roque cada 16 de agosto, aunque no en la Catedral en los últimas décadas. Se trata de una ceremonia de marcado carácter religioso pero contemplada en el Reglamento de Honores y Distinciones municipal, aunque los concejales de IU la han criticado y son partidarios de una administración laica en la que cada miembro de la corporación acuda a actos religiosos, tradicionales o no, a título personal pero no en representación de la corporación segoviana.
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