El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, advirtió ayer a su exsocio de Vox que «primero tiene que arreglar sus problemas internos» y aclarar si están «más preocupados» por los ciudadanos de la Comunidad que por «sus jefes y la oligarquía» de su partido en Madrid, a la vez que subrayó que no hay «enemigos» en los grupos de las Cortes y está abierto a negociar con todos.
Fernández Mañueco y David Hierro, que se estrenaba como portavoz de Vox en las Cortes en sustitución de Juan García-Gallardo, protagonizaron el primer 'cara a cara' en la sesión plenaria de ayer, con la petición por parte del segundo de que el presidente vuelva al «sentido común», abandone las políticas de izquierda y negocie solo con Vox, según informa Ical.
El presidente replicó, ante la pregunta sobre su minoría parlamentaria, que su Gobierno es estable y funciona desde hace años, expresó el deseo de dialogar con todos los grupos parlamentarios, donde no ve «enemigos», pero advirtió de que tampoco observa estabilidad ante «la bicefalia incómoda» en el Grupo Socialista, en referencia a Luis Tudanca y Carlos Martínez.
Así, extendió la situación de los grupos a Vox, donde recordó el cambio de tres portavoces en seis meses, a lo que unió la crisis surgida en los grupos municipales en Palencia y Salamanca, junto con la del Grupo Mixto con sus procuradores «de salida».
«Con quienes quieran dialogar, primero tienen que arreglar sus problemas y luego hablamos», aseveró, para subrayar que sí tienen que hablar con los «jefes» de Vox en Madrid, con «la oligarquía» a la que se refirió Juan García-Gallardo, y concluyó que este partido está «más preocupado de defender intereses de algunos gobiernos extranjeros que los de Castilla y León».
El presidente de la Junta afirmó que pueden coincidir «en muchas cosas», pero añadió que «más que sembrar» en Vox «están más interesados en alborotar el gallinero» y en parecer «más salvadores de Sánchez».
Defensa de los principios.
David Hierro, que inició su primera intervención con que la posición de Vox será la misma en defensa de los principios de «forma firme y de la palabra» y sin esperar de su «condescendencia» y con la petición de «respeto y caballerosidad», argumentó que la estabilidad que esgrime Fernández Mañueco no es «repartir millones de publicidad institucional» ni «ponerse de rodillas ante los sindicatos».
El nuevo portavoz de Vox pidió al presidente de la Junta que «despierte», vuelva al «sentido común» y se desmarque de políticas de la izquierda que le atribuyó, como la defensa de la Agencia 2030 y del pacto verde, que «tanto daño hacen a los agricultores y ganaderos de Castilla y León».