Las denuncias por agresión sexual del ya ex portavoz de Sumar en el Congreso de los Diputados y parlamentario de Más País, Íñigo Errejón, han sido un jarro de agua fría para el ámbito de las izquierdas, también en Segovia, desde Izquierda Unida, integrada en la coalición Sumar a nivel nacional, a Segovia en Marcha (Podemos y Alianza Verde) o el PSOE, situado más en el centro-izquierda pero socio de Sumar en el Gobierno de España. En estas formaciones coinciden en la sorpresa y repulsa que ha producido la noticia y en el apoyo a las víctimas, además de recordar que la violencia machista es estructural y transversal, que ninguna esfera, tampoco la política, ni la política de izquierdas, está exenta.
Carlos Serrano, coordinador provincial de IU en Segovia, explicaba esta semana en los micrófonos de Vive Radio Segovia, a preguntas de Alberto Guerrero, que «lo que toca es que los partidos den una lección» y lamenta que «en formaciones políticas que se dicen feministas y hacen políticas feministas, por desgracia hay machismo, hombres con actitudes machistas y abuso de poder en algunos casos. Es algo que hay que desterrar y las diferentes organizaciones tenemos que tomar las medidas oportunas para ello».
Entiende el «hartazgo y la desolación» de la ciudadanía ante noticias como esta y apunta que, aunque en su formación «llevamos años luchando en este tipo de asuntos y tenemos una Comisión de Cuidados nueva», admite que ningún mecanismo es suficiente cuando «el machismo es estructural y toda la sociedad está inmersa en ello. Los hombres tenemos mucho que aprender de las enseñanzas del feminismo. En los partidos de izquierda, aunque intentamos poner acciones para erradicarlo y combatir este tipo de situaciones, siempre quedan pendientes asuntos por resolver y hay que seguir trabajando».
En cuanto a la situación en la que queda Sumar, por un lado explica que la Colegiada Federal de Izquierda Unida, a la que pertenece, considera «que se tiene que resarcir a la sociedad y una de las formas de hacerlo es que la nueva portavoz en el Congreso sea una mujer».
Por otra parte, insiste por un lado en que las decisiones en la coalición deben tomarse a partir de ahora de forma colegiada y democrática y, por otro, en que si hay personas «que tienen que asumir responsabilidades políticas lo tendrán que hacer pero creo que no es el momento de hablar de liderazgos y cuotas de poder en la izquierda transformadora cuando lo que ha pasado es tan grave».
«Un caso más». Por su parte, la senadora socialista por Segovia, Lirio Martín, que precisamente forma parte de la Comisión contra la violencia de género de la Cámara Alta, indica que el de Errejón «es un caso más, lo que pasa es que es un caso doloroso por ser quien es y por la perspectiva feminista y los ideales que ha defendido, la contradicción que ha generado; pero lo importante no es él y los hechos que se denuncian tendrán que dilucidarse si tienen carácter delictivo; no la responsabilidad política, que se ha atajado de raíz, se ha depurado en 48 horas, en cuanto se ha tenido constancia. No debemos poner el foco en el agresor. Lo importante son las víctimas, que no solo cuenten con apoyo o la sensibilidad de la sociedad, que es muy importante, sobre todo que se sientan seguras y puedan recuperar su vida».
Insiste en que para ello hay instrumentos y herramientas desde las políticas de igualdad, que no son un eslogan, añade, sino políticas transversales en el ámbito educativo, en el de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y herramientas legales desde el acompañamiento cuando se pone una
Denunciar. Advierte que «sí es importante denunciar para que ese sistema funcione y es imprescindible que no sientan miedo... porque las fuerzas de seguridad, Policía y Guardia Civil, ahora mismo tienen la formación, están preparados y cualificados, y lo puedo asegurar porque lo conozco de primera mano por los cinco años que he sido subdelegada».
Coincide en la importancia de la unidad de acción, como otros políticos segovianos, entre ellos la concejala de Igualdad del Ayuntamiento de Segovia, Azucena Suárez, quien en el pleno ordinarioo del mes de octubre ha defendido la adhesión de la corporación a la declaración de la FEMP en ese sentido, a la que se sumaron todos los grupos políticos a excepción de VOX.
Lirio Martín no entiende «mensajes sectarios que aprovechan un caso mediático para cargar contra las fuerzas que defienden estas políticas. VOX resta y a mí no me interesa, a los progresistas nos interesa lo que permite avanzar en derechos y libertades».
Guillermo San Juan, de Podemos Segovia, concejal de Segovia en Marcha, reconoce que ha recibido la noticia de la denuncia a Errejón «como la mayor parte de la opinión pública, con estupefacción por un lado y, por otro, de rabia, porque no gusta que pasen estas cosas en el seno de formaciones progresistas, así como empatía con las mujeres que han vivido esas situaciones. La conclusión que puede sacarse, aclara, «es que hay que escuchar más y mejor al feminismo» y la lección es «romper el silencio» y que «nadie puede salir impune».
Ese aprendizaje también debe ir, a su juicio, «por organizaciones cada vez con más contrapoder y más colectivas».
San Juan señala «hipocresía y la doble vara de medir» de la derecha porque «su manera de afrontar este tipo de situaciones ha sido el caso Nevenka» de Ponferrada por parte del PP, mientras en VOX hay condenados por violencia de género que mantienen sus cargos.
En ese sentido, la portavoz del PSOE y exalcaldesa socialista, Clara Martín, reprocha también al PP, en este caso en el gobierno municipal, que no se realicen en el Ayuntamiento los minutos de silencio contra la violencia de género como en anteriores mandatos «para visibilizar esta lacra social» y recalca que el Partido Socialista «actúa tajantemente y elimina de sus filas a los agresores contra las mujeres».