Avanzado el primer trimestre del año, todavía sin presupuesto en el Ayuntamiento de Segovia, el alcalde, José Mazarías, da a entender que hay que meter el acelerador a las negociaciones con otros concejales o grupos y ha hecho un llamamiento esta semana a lograr un cambio entre quienes forman la corporación municipal y abandonar «la crispación y el enfrentamiento, en muchos casos personales» por parte de todos, «yo el primero», ha dicho.

A la pregunta concreta, en rueda de prensa, de si esa declaración de intenciones puede interpretarse como una disculpa, algo que reclaman desde la oposición por el discurso del regidor en el pleno de diciembre, cuando el PP no consiguió apoyo de nadie para sacar adelante el presupuesto, Mazarías responde: «yo no quiero pedir disculpas por nada pero creo que tenemos que llevar el tema donde creo que tiene que estar. Lo importante no es si me han dicho o yo he dicho. Lo importante es Segovia y, por lo tanto, tenemos que abandonar el tono que nos ha llevado a esa crispación y falta de entendimiento para conseguir que Segovia avance. Si lo entiende como una petición de disculpas lo que estoy diciendo es que por estos micrófonos deberíamos pasar todos los portavoces de todos los grupos políticos y reconocer que no esa no es la fórmula».  

La concejal de Ciudadanos, Noemí Otero, dice que sí puede considerarse «un primer paso, un avance después de casi  tres meses" pero, además de esa «disculpa a lo Mazarías», afirma que lo importante es un cambio de «actitud», de «filosofía», de todo el equipo de gobierno que lidera el alcalde.

En este sentido, apunta a las propuestas que Ciudadanos ha defendido en los plenos municipales a lo largo de 2024, muchas de ellas coincidentes con el programa electoral del PP, asegura. Por eso insiste en que la negociación, que confirma sigue adelante, debe pasar por el apoyo a la economía local: hostelería, comercio (sin olvidar campañas de bonos comercio), industria y por medidas para hacer atractivo el municipio a la inversión de nuevas empresas.

Reclama también un diálogo de verdad con toda la oposición y, sobre todo, con el tejido asociativo y colectivos ciudadanos, porque considera que en los últimos meses ha habido conflictos del equipo de gobierno con Policía Local, taxistas, operadores culturales, asociaciones de vecinos, etc. Para todos ellos pide mayor atención y apoyo, así como para las entidades del tercer sector, que considera «abandonadas» en gran medida. Otro de los puntos de negociación importantes para Ciudadanos es conseguir una Oficina de Urbanismo que funcione. 

«Muchas posibilidades». El alcalde explica que, aunque el Ayuntamiento puede trabajar con un presupuesto prorrogado, son necesarios una serie de trámites, como las modificaciones presupuestarias, que «entorpecen» la actividad municipal y en ocasiones pueden dejar fuera proyectos importantes por falta de tiempo. Por eso, aunque reconoce que no puso una fecha tope para las negociaciones, «a nosotros siempre nos parece que en este primer trimestre es en el que tenemos que trabajar de forma intensa para conseguir el acuerdo. Estamos apurando ese plazo; es verdad, quedan días para que acabe este mes pero la puerta de la Alcaldía está abierta para dialogar con todo el mundo y compartir proyectos de interés».

Así las cosas, Mazarías aboga porque en la negociación más que ceder se «conceda eso que puede beneficiar a la otra parte y puede hacer que cambie de opinión. Por lo tanto, afrontamos las conversaciones con el objetivo de que Segovia no se pare y tenemos muchas posibilidades de llevar a cabo ese trabajo».