El colegio Nuestra Señora de la Esperanza celebró este miércoles su 50 aniversario con un acto que sirvió para rememorar la historia de este centro. El propio colegio ha compartido un pequeño resumen de cómo ha sido este medio siglo de educación e inclusión.
"En el año 1964, un grupo de padres que tenían un hijo con discapacidad decidieron unir sus esfuerzos para que sus hijos estuvieran atendidos en centros especializados, ya que hasta entonces permanecían en sus casas sin poder asistir a ningún colegio y por lo tanto sin recibir ninguna educación. Así nació Apadefim. Sus estatutos fueron redactados el 28 de septiembre de 1964 y aprobados el 16 de febrero de 1965, por orden del entonces Ministerio de la Gobernación. Esta asociación quedó inscrita en el Registro Especial de Asociaciones del Gobierno Civil de Segovia y la primera Junta General fue constituida legalmente el 25 de marzo de 1965.
Lo primero que hizo la asociación para cumplir su objetivo fue poner en funcionamiento el Colegio Nuestra Señora de la Esperanza, que en régimen de patronato comenzó su andadura en septiembre de 1965. El Estado designaba a los maestros y la asociación debía procurar locales y hacerse cargo de los gastos de funcionamiento del centro. Este primer curso eran cuatro maestros especializados en pedagogía terapéutica y funcionó en las aulas cedidas en el Colegio Público de San José Obrero. El segundo curso se pasó entre las oficinas de la asociación, en la calle de José Zorrilla y el viejo caserón llamado Casa de Guardias, en la Ctra. De Boceguillas, el cual estaba dentro de una finca que había adquirido Caja de Ahorros cedida a la asociación para utilizarla como colegio. Aquí ya fue posible que funcionara el comedor.
50 aniversario del colegio Nuestra Señora de la EsperanzaEl ensanche de la Ctra. De Boceguillas se llevó por delante la Casa de Guardias y de nuevo no había local para el colegio. El obispo de Segovia de entonces, Antonio Palenzuela Velázquez, ofreció el comedor de caridad en la travesía de Capuchinos, se acondicionó lo indispensable y allí permaneció hasta el año 1974, en el que se pudo trasladar al sitio actual, ya que la Caja de Ahorros construyó un nuevo edificio. Por primera vez se conseguía estar en un centro construido expresamente pensado en alumnos con discapacidad y en el que podía funcionar el Internado para alumnos de la provincia.
En el curso 1988-1989, el Estado se hizo cargo de todas las instalaciones y el colegio pasó a ser estatal o público. Se configuró jurídicamente en el curso 1989-90. En el año 2000 pasó la titularidad a la Consejería de Educación de la Junta de Castilla y León.
Actualmente, 50 años después, el centro cuenta con 23 maestros y profesores, especializados en Pedagogía Terapéutica y Audición y Lenguaje, profesores de taller, dos fisioterapeutas. tres enfermeras, trece ayudantes técnicos educativos, dos cocineros, dos ayudantes de cocina, cuatro personas de personal de servicio, dos conserjes, un vigilante nocturno y una persona de mantenimiento. Cada uno desde su sector, buscamos poder crear un entorno donde nuestros alumnos no solo aprendan, sino que también se sientan felices y valorados.