Este año tampoco visitará La Albuera un equipo de Primera División. Como la temporada pasada, la Gimnástica Segoviana ha caído en la primera ronda de la Copa del Rey. Un gol de penalti en la prórroga ha certificado el pase del Cacereño, de Segunda RFEF.
La noche ha terminado mal para el equipo de Ramsés y no había empezado mejor. El Cacereño se adelantó a los ocho minutos, una ventaja clave en un partido marcado por el mal estado del terreno de juego por la lluvia.
Pero la Segoviana no se rindió. Sin remilgos para bajarse al barro a pesar de que en menos de 72 horas recibirá al Barcelona B en liga, su gran reto esta temporada, los azulgrana buscaron el empate a pesar de que la noche parecía estar de no.
Las esperanzas llegaron de la falta de puntería en la segunda mitad del Cacereño, asomado al 2-0 varias veces. Pero el equipo extremeño perdonó y lo pagó a falta de cinco minutos. Manu puso uno de esos centros a pie cambiado que odian los porteros y el balón acabó dentro de la portería rival. 1-1.
La eliminatoria estuvo ahí para la Segoviana, que acarició el gol de la clasificación para la siguiente ronda antes de que llegara la prórroga. En el tiempo extra, un penalti cometido por Sergi Molina finiquitó el sueño copero de la Segoviana, que no pudo forzar los penaltis aunque todavía tuvo veinte minutos para intentarlo.