Dos personas han fallecido este martes en las piscinas de los municipios segovianos de Navas de Oro y Bernardos. Tal y como han indicado los regidores de las dos localidades, ambas muertes han sido por causas naturales y no por ahogamientos según las primeras hipótesis.

El primero de estos fallecimientos se ha producido sobre las once y media de la mañana. Según la información facilitada por el alcalde de Navas de Oro, Raúl Vela, una mujer de 71 años ha muerto cuando participaba en un cursillo de natación en la piscina pública del municipio. La actividad acababa de comenzar cuando esta persona se ha desvanecido dentro de la piscina.

Rápidamente la socorrista, con la ayuda de otras personas, la ha sacado del agua y ha iniciado las maniobras de reanimación, que se han prolongado durante más de una hora. "La respuesta ha sido rapídisima. En cuatro minutos ya estaba en la piscina la ambulancia de Nava de la Asunción y después han venido otras dos, Guardia Civil... Han estado dando masajes cardíacos durante más de una hora y la habían estabilizado, pero al subir a la ambulancia ha fallecido", ha relatado el alcalde de Navas de Oro. Fuentes de la investigación han aclarado que ha sufrido una rotura aórtica. La fallecida se llamaba Toñi, estaba casada y tenía tres hijos. "Estaba empadronada en Madrid pero pasaba largas temporadas en Navas de Oro", ha destacado Vela. 

Ha sido un martes negro en las piscinas de la provincia. Apenas cinco horas después del suceso luctuoso de Navas de Oro se ha producido otro muy parecido en Bernardos. Un hombre de unos 80 años ha fallecido cuando se encontraba en la piscina municipal. "Estaba sentado en el césped con su mujer y ha sufrido un infarto fulminante, según me han transmitido el teniente de alcalde y una concejala que estaba en la piscina", cuenta el alcalde de Bernardos, José Luis Díez. La socorriste y un policía nacional que estaba fuera de servicio han tratado de reanimarle, pero no han podido hacer nada para salvar su vida.

La instalación, a la que se han desplazado los servicios sanitarios y la Guardia Civil, ha sido desalojada mientras se llevaba a cabo el levantamiento del cadáver. La autopsia se le practicará en las próximas horas. El fallecido era Ciriaco, casado, padre de dos hijos y vecino de Bernardos. "Solía ir a la piscina", explica el alcalde, consternado con lo sucedido.

"Aunque hayan fallecido, el socorrista inició la RCP de inmediato. La importancia de que haya un socorrista presente en las piscinas no se debe solo a que eviten ahogamientos sino también para responder ante este tipo de problemas de salud", ha recordado el director de la Escuela Segoviana de Socorrismo, Luis Miguel Pascual.