La oferta de alquiler de habitaciones en pisos compartidos ha crecido un 18% en Segovia capital durante el último año, según recoge un informe del portal inmobiliario Idealista. Un porcentaje que se sitúa muy por debajo de la media nacional (34%), pero importante en cualquier caso dentro de un mercado tan limitado y singular como el de esta ciudad. No en vano, los estudiantes «copan prácticamente el 80% de lo que hay», advierte Miguel Tovar, presidente del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Segovia y vicepresidente de la Asociación Segoviana de Empresas Inmobiliarias (Aseinmo). El presidente de esta última organización, Gonzalo Marina, de la Inmobiliaria 7 Picos, también advertía en mayo, por otra parte, que la demanda de pisos en alquiler ya superaba la oferta existente, tal y como destacaba en una entrevista concedida a este periódico, mientras Tovar teme incluso que la desproporción se agudice. Entre otros motivos, por la nueva ley de vivienda que entró en vigor precisamente el 26 de mayo y que «genera desconfianza entre los propietarios», al tiempo que los topes fijados para los precios cree que producen el efecto contrario por subidas más altas de lo habitual cuando no se trata de actualizar un contrato vigente, sino de hacer uno nuevo por cambiar de inquilino.

Además, desde Idealista advierten que el citado aumento de la oferta de pisos por habitaciones ha contribuido a que estos se encarezcan menos, ¿de ahí entonces que se haya producido el efecto contrario en el caso de los alquileres convencionales, al menguar las opciones disponibles en el mercado? 

Por de pronto, el estudio de Idealista sobre la oferta de pisos compartidos, actualizado con datos de este mismo mes, señala que sus precios en Segovia están igual que hace un año, en torno a 250 euros por habitación. Asimismo, la subida a nivel nacional ha sido «sólo» del 3% en el mismo periodo y su precio medio se sitúa en 350 euros, aunque siempre hay excepciones al alza y a la baja, claro. 

Más oferta de alquiler de habitaciones que pisos para familias

Dos capitales comparten el porcentaje de subida más elevado de España, concretamente Ávila y Palma, con un 19%. A continuación, Castellón de la Plana (16%), Málaga (14%), Sevilla, Cádiz o Pamplona (13% en los tres últimos casos). En Barcelona, los precios se han encarecido un 8%; y en Madrid algo menos, un 7%. San Sebastián es la única ciudad en la que se han reducido en el último año, al caer un 2%, y en total son seis las capitales donde los precios se mantuvieron sin cambios: Palencia, Cáceres. Salamanca, Huelva, Almería y el caso ya citado de Segovia.

En cuanto al precio total por habitación, Barcelona es la capital más cara (485 euros), seguida de Palma (475), San Sebastián (450), Madrid (450), Bilbao (400) y Málaga (400). Las más baratas: Ciudad Real (188), Badajoz (199), Cáceres (200), Lugo (200), Palencia (200) y Zamora (200). Pero con Segovia también en un puesto bajo después de que no se hayan incrementado sus precios por habitación en el último año, con 36 capitales por delante ahora.

Sin embargo, el precio medio de los alquileres en general, ahora sin distinción entre los que se comercializan por habitaciones o completos, y por tanto analizando el mercado en su conjunto, ha subido un 7,2% en Segovia en un año, según otro informe del mismo portal inmobiliario, con datos actualizados hasta el pasado mes de julio, que además revela cómo la mayor parte de esta subida se ha producido desde abril, con un alza del 4,6% en cuatro meses. El metro cuadrado ha pasado a costar así 9,3 euros, frente a 8,7 en julio de 2022, una diferencia que, llevada a un piso de 80 metros cuadrados, por ejemplo, supone 48 euros más al mes (de 696 a 744).

Más oferta de alquiler de habitaciones que pisos para familias

Coincide además que los precios de los alquileres, siempre según este estudio, marcaron en junio su máximo histórico en Segovia con 9,4 euros por metro cuadrado y mes, aunque la media nacional es más alta, tras registrar un incremento del 9,3% en un año y alcanzar los 11,9 euros en julio. No obstante, de este último valor medio tiran especialmente las más caras, empezando por Barcelona (18,9), Madrid (17,1), San Sebastián (16,5), Palma (14,5) y Bilbao (13,1), ya que Segovia se sitúa aun así en la mitad alta  del ranking por capitales (puesto 20 de 52), siendo a su vez la más cara de Castilla y León, por delante de Salamanca (24ª con 8,6 euros por metro cuadrado), Burgos (28ª con 8,1) o Valladolid (37ª con 7,6).

«UN PROBLEMA SERIO». Miguel Tovar advierte de «un problema serio» en el mercado de alquiler de Segovia porque «va a haber menos oferta, va a haber más demanda y las rentas van a seguir subiendo».

Respecto a la reducción de la oferta, «los propietarios tienen miedo a la okupación de viviendas por la nueva ley de arrendamientos urbanos», que brinda más protección al inquilino frente a desahucios, «y por tanto ahí hay cuando menos una limitación psicológica». En cuanto al aumento de precios, aparte de la ley no escrita más básica del mercado, como es de la oferta y la demanda, considera que los topes legales fijados para la actualización anual de los contratos (2% en 2023 y 3% en 2024, a la espera de un nuevo índice que se publicará a partir de 2025) «está llevando a que, cuando una vivienda se queda libre y sale de nuevo al mercado, el propietario se cura en salud, invierte un poco en ella y le da un incremento superior a ese 2%». 

El aumento de la demanda de alquileres, entretanto, «existe porque está llegando gente de fuera no sólo de Segovia sino de España», extranjeros con una capacidad económica limitada. «Ahí tenemos algo de colapso por lo complicado que resulta encontrarles viviendas dignas con buenas condiciones económicas», advierte, y sucede parecido, en general, con cualquier perfil que no responda al del arrendatario de piso compartido (sobre todo estudiantes), o al del turista que demanda alojamiento de pocos días.

«Un matrimonio con dos o tres hijos suele tener un 'tope' de renta, y de ahí no puede pasar por todos los demás componentes de gastos que tiene que atender en el día a día», continúa el presidente del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Segovia y vicepresidente de la Asociación Segoviana de Empresas Inmobiliarias. Aun así, matiza que «hay propietarios que están empezando a desdeñar al estudiante por los problemas que puede dar y prefiere una familia, pero el problema que tiene la familia es que llega un momento en que no puede pagar las rentas que está asumiendo por la carestía de la vida», insiste. Y la realidad es que «la oferta está ocupada al 80% por estudiantes, mientras el otro 20% es el que se tiene que manejar para el resto», concluye.