San Quirce busca cómo costear el mantenimiento de su sede

M.Galindo
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La Real Academia confía en obtener a lo largo del próximo curso la declaración de Bien de Interés Cultural para la Casa de Antonio Machado, y potenciará su oferta de actividades

Pablo Zamarrón, director de la Real Academia de San Quirce. - Foto: Rosa Blanco

La conferencia del académico de número Carlos Álvaro  «La efímera vida del semanario Segovia (1923), brazo periodístico de la Tertulia» abre hoy viernes la actividad académica de la Real Academia de Historia y Arte de San Quirce para el curso 2023/24, con el objetivo no solo de mantener su actividad investigadora y divulgativa, sino de potenciar aquellos aspectos que le distinguen entre las instituciones culturales de esta índole en toda España.


La institución heredera de la  Universidad Popular Segoviana hace balance en el acto inaugural del  trabajo desarrollado a lo largo del curso pasado, con hitos fundamentales como el Curso de Historia de Segovia, la visita un año más de los Pintores Pensionados o la publicación del número 121 de la revista 'Estudios Segovianos', y otros de relevancia como las "Lecciones de arte" con las que la Academia abre sus puertas a la ciudadanía con una visión distinta del patrimonio artístico y cultural de la capital.

Por otra parte, el curso trajo también cambios en la nómina de académicos de la institución, con nuevas incorporaciones y con la dolorosa pérdida de miembros ilustres que marcaron época con su trabajo como José Miguel Merino o Jesús González de la Torre, que pasan también por el cambio en su dirección, en la persona del músico e investigador Pablo Zamarrón.

Así, en el acto inaugural, serán recibidos los académicos correspondientes nombrados durante el último año: José Manuel López Gómez, Ramón Sánchez González, María Victoria Sotomayor Sáez, Guillermo Altares Lucendo, José Antonio Sacristán del Castillo y  Félix Martínez Llorente.

Pero la actividad de la Real Academia continúa este año, y lo más inminente será la celebración de una nueva edición del Curso de Historia de Segovia, que este año estará dedicado a la Sierra de Guadarrama. El curso comenzará el 1 de marzo y concluirá el 10 de mayo, y contará con diez conferencias que aproximarán la visión de este entorno natural desde  disciplinas: la naturaleza, la historia, la ciencia, la literatura, el arte, la música o incluso el deporte.

En cuanto al Curso de Pintores Pensionados, la Real Academia confía en que en la edición de 2024  pueda contar con más días «y la idea es que los pintores trabajen durante una semana en el Paular», tal y como asegura el director de la Academia Pablo Zamarrón . También se va a intentar que haya pensionados de otros países «y  seguiremos con la reivindicación de los últimos años para que los pintores puedan recuperar el Palacio de Quintanar como lugar de alojamiento. En la Casa de Espiritualidad han estado muy a gusto, y agradecemos sinceramente esa acogida, pero lo suyo es que regresen al Palacio de Quintanar, el lugar de origen», explica el director.

En el ámbito doméstico, volverá a intentar recabar apoyo para el mantenimiento de su sede, la antigua iglesia de San Quirce, con los escasos recursos económicos de los que dispone la entidad. Así, Zamarrón señala que «estamos estudiando la manera de afrontar todas esas dificultades con más desahogo y nuevas fórmulas. Las instituciones de Segovia nos ayudan, y es de agradecer, pero toda ayuda es poca»

Por otra parte, la institución sigue pendiente de la declaración como Bien de Interés Cultural de la Casa de Antonio Machado, cuya tramitación «no está resultando fácil por cuestiones relacionadas con la naturaleza de la finca, y quedan flecos por resolver».  Zamarrón asegura que conseguir que la Casa de Machado en Segovia sea declarada monumento «es vital para apuntalar su supervivencia, porque eso nos permitirá acceder a la ayuda del 2% Cultural. «La Casa de Machado, como dice nuestro querido compañero Carlos Muñoz de Pablos, es ceniza en el aire y requiere un cuidado muy especial», señala el director