Los castellanos y leoneses otorgaron un 6,68 de media al funcionamiento de la sanidad pública de Castilla y León durante el pasado año, lo que supone la segunda nota más alta del país, sólo por detrás de Asturias (6,72), y bastante superior a la media nacional (6,28). Además, el sistema mejoró su calificación respecto a 2022 y 2023, cuando era de un 6,27 y un 6,4, si bien todavía no ha alcanzado la más elevada, que fue un 7,07 en 2017, tal y como se recoge el Barómetro Sanitario global del año 2024 publicado por el Ministerio de Sanidad. Un documento que indica que el nivel de satisfacción con el sistema sanitario público de Castilla y León –se haya utilizado o no– ha mejorado unas décimas, mientras en el conjunto del país español se mantiene estable en 2024, con una puntuación de 6,28 sobre diez. Tras Asturias y Castilla y León, figuran a poca distancia Cantabria (6,67) y Aragón (6,56). A la cola figuran las ciudades autónomas de Ceuta (5,56) y Melilla (5,53), así como Andalucía (5,72).
Los ciudadanos de Castilla y León continúan mostrando una clara preferencia por los centros públicos en las cuatro áreas asistenciales analizadas: médico de cabecera (72,3), consulta de especialistas (62,5), ingreso en hospital (82,7) y urgencias (79,3), superando en todas ellas las medias nacionales. Respecto a la atención primaria, los ciudadanos encuestados por el Barómetro Sanitario otorgan un 6,71 a este servicio en la Comunidad, frente al 6,29 de media en todo el país, por encima del 6,2 dado a las consultas de los especialistas pero por detrás del 6,75 de las urgencias hospitalarias. Además, el 1-1-2 recibe un 7,78; las urgencias de Primaria, un 6,8, y los ingresos en los hospitales, un 7,47 en Castilla y León.
El informe del Ministerio señala que más de un 80% acudió a una consulta de medicina de familia o general, ya sea en la sanidad pública (60,3%) o la privada (8,4), mientras en ambas fueron tratados un 17,2%. Además, en la pública, un 53% asegura que cuando ha tenido un problema ha podido consultar con su facultativo, si bien un 17,9% indica que alguna vez no lo ha conseguido. Entre estos últimos, un 41,3% no pudo ver a su médico porque le dieron cita «para muchos días después», por lo que se fue a urgencias, y un 32,6%, cuando llegó la fecha, ya no era necesaria la consulta.
Los ciudadanos otorgan un 6,68 a la sanidad pública de CyL - Foto: FS ICALUn 62,3% de los encuestados en Castilla y León apuntó que pasó más de un día hasta que le atendió el médico de familia porque no había cita antes y un 39,9% tuvo que esperar entre tres y cuatro días. Además, un 32% aseguró que la espera fue superior a la semana. En conjunto, la Atención Primaria los que tuvieron que esperar por una consulta lo hicieron de media 5,27 días, muy por debajo de los 8,67 que se registra en todo el país. Además, un 61,5% ha tenido una consulta telefónica en el último año, con una satisfacción elevada. Respecto a las listas de espera, para un 52,1% siguen igual en la Comunidad y para un 32% han empeorado, mientras sólo un 7,1 cree que han mejorado. Además, sobre los ingresos hospitalarios, los castellanos y leoneses valoran con un 6,95 el número de enfermos por habitación.