Bruselas reforzará en abril los aranceles que aplica al acero

Europa Press
-

La UE endurece sus cuotas para proteger la industria siderúrgica frente a la competencia desleal y las decisiones económicas de EEUU

El vicepresidente comunitario para la Prosperidad y la Estrategia Industrial, el liberal francés Stéphane Séjourné - Foto: Yves Herman

La Comisión Europea reforzará a partir del 1 de abril el sistema de contingentes y cuotas que aplica al acero con el objetivo de reducir hasta en un 15% las importaciones al mercado común, en una de las primeras medidas del plan de acción para la siderurgia que presenta Bruselas para hacer frente a las vulnerabilidades del sector, lastrado por los nuevos aranceles de hasta el 25% anunciados por Estados Unidos y la competencia desleal de rivales como China.

"Debemos proteger a nuestras acerías frente a la competencia desleal extranjera, venga de donde venga", ha avisado el vicepresidente comunitario para la Prosperidad y la Estrategia Industrial, el liberal francés Stéphane Séjourné, en una rueda de prensa en Bruselas en la que ha defendido que Europa debe ser "un jugador y no simplemente el terreno de juego" para empresas y productores de países terceros.

Así, la primera medida "inmediata" será "reforzar a partir del 1 de abril" la llamada cláusula de salvaguarda que ya prevé contingentes arancelarios por los que se grava el acero que entra en la Unión Europea por encima de las cuotas establecidas, según ha explicado Séjourné. Este ajuste tendrá especialmente en cuenta las categorías en donde la "presión es más aguda", precisan los servicios comunitarios, por combinar un significativo aumento de las importaciones y una caída de la demanda.

Entretanto, también se pone en marcha una revisión a medio plazo porque esta cláusula dejará de estar en vigor en junio de 2026, pero Bruselas avisa ya de que "no es razonable asumir" que los problemas estructurales de exceso de capacidad global y su impacto negativo en el mercado se hayan corregido.

En su propuesta, de hecho, el Ejecutivo comunitario avisa de que las medidas que están adoptando países terceros para limitar las importaciones a sus propios mercados, como los aranceles de Trump a todo el acero y aluminio extranjero, convertirán el mercado europeo en el principal receptor de esa sobreproducción.

Séjourné ha marcado "el tercer trimestre" de este año como plazo para presentar la reforma necesaria para que una nueva medida de salvaguarda permanente que reemplace la cláusula en vigor antes de que ésta deje de tener validez. La propuesta tendrá en cuenta los cambios en la demanda europea y otros parámetros como la seguridad, aunque los servicios comunitarios aseguran que se preservará el "aperturismo" del mercado de la UE.

Rebajar los precios

La Comisión Europea asume que la siderurgia está en un "punto de inflexión crítico" que requiere medidas para hacer frente a las distorsiones del mercado generadas por las guerras tarifarias o los subsidios desleales pero también apunta la necesidad de actuar frente a los altos precios de la energía o ante la necesidad de mayores inversiones para avanzar en los objetivos de reducción de emisiones contaminantes.

En este contexto, el plan de acción para el acero y la industria del metal retoma otras iniciativas como reforzar el mecanismo de ajuste de carbono en frontera (CBAM, por sus siglas en inglés), conocido como el 'arancel climático', y sobre el que Bruselas quiere actuar "antes de que acabe el año" para evitar desigualdades entre los productores europeos y los de terceros países que "maquillan de verde" sus producciones.

"Nuestros fabricantes no pueden ser los más virtuosos y además los más penalizados", ha defendido Séjourné, que se ha referido a ampliar el ámbito de aplicación del mecanismo a determinados productos transformados a base de acero y aluminio y también a tomar medidas contra la elusión de las obligaciones.

El Ejecutivo comunitario también apunta medidas como promover el uso de los contratos bilaterales de largo plazo (PPA, por sus siglas en inglés) que se establecen entre los generadores de energía y una entidad pública, al tiempo que anima a los gobiernos a aprovechar la "flexibilidad fiscal" y la reducción de las tarifas de red para aliviar la volatilidad de los precios de la electricidad.

Otra de las acciones evocadas por el vicepresidente comunitario tienen que ver, por ejemplo, con promover la "circularidad" de los metales, para lo que se establecerán objetivos de reciclado de acero y aluminio en sectores clave y se explorará aplicarlos a otros sectores como el de la construcción o la electrónica. Bruselas también baraja medidas en el ámbito de la chatarra, en tanto que necesaria para la descarbonización de la industria siderúrgica.