La Consejería de Cultura y Turismo, a través del Centro de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de Castilla y León, ha acometido labores de conservación y digitalización de una selección de dibujos del pintor y ceramista Daniel Zuloaga que forman parte del fondo documental que custodia el Museo Zuloaga de Segovia. En concreto, la actuación se ha llevado a cabo en las acuarelas que el artista realizó para la elaboración de grandes zócalos y paneles cerámicos.
La intervención forma parte de la colaboración que mantienen el Centro de Restauración de Bienes Culturales de Simancas y el Museo de Segovia desde 2014, para las tareas de conservación y preservación del archivo personal del Daniel Zuloaga, ubicado en la Iglesia de San Juan de los Caballeros de Segovia, antiguo taller y vivienda del artista y su familia y sede del actual Museo Zuloaga.
El Museo exhibe una parte del legado artístico de Daniel: piezas cerámicas, mobiliario y pintura, junto con un importante fondo documental, que atiende a gran diversidad de tipologías. Entre ellas, se pueden encontrar fotografías de carácter personal y profesional y una sección con material gráfico, con los dibujos y bocetos preparatorios de sus cerámicas, junto con una amplia colección de estampas, adquiridas bien como fuente de inspiración o coleccionismo.
El conjunto de dibujos del ceramista en los que se ha intervenido en el CCRBC son trabajos preparatorios realizados por el autor de cara a la elaboración posterior de grandes obras y paneles con azulejo cerámico. El destino de estos zócalos y paneles decorativos era el de embellecer los interiores y las fachadas de algunos edificios de principios del siglo XX. Se trata de un material de particular interés por la diversidad de diseños. De igual forma, su preservación a través de la digitalización es clave ya que algunas de estas piezas cerámicas se han perdido por la demolición de los inmuebles y solo quedan sus bocetos.
Proceso de conservación arduo y complejo
Las obras restauradas se encuentran adheridas a hojas de cartulina entelada, en composición única o con un máximo de tres elementos sobre un fondo granate o marrón. Esta presentación atiende a una planificación atribuida al artista, para la formación de álbumes que, según las temáticas, mostraría a sus potenciales clientes. Actualmente, las hojas se presentan sueltas, con materiales y sistema constructivo que se repiten y que también se pueden observar en otros volúmenes que se conservan en el archivo.
En todos los casos, los dibujos son acuarelas sobre papel blanco. Su estado de conservación manifestaba alteraciones propias del envejecimiento natural de los materiales y de las antiguas condiciones de instalación a las que han estado sometidos lo largo del tiempo. Tras evaluar su estado, se efectuaron diferentes pruebas para ver la idoneidad de los procedimientos. En este proceso, se pudo concretar el alcance del problema en la resistencia a la reversibilidad que tiene el adhesivo en la unión de los materiales.
Partiendo de la particularidad que conlleva su presentación se han realizado tratamientos de carácter conservativo, respetando la evidencia de su montaje histórico. Para ello, se han practicado tareas curativas de limpieza, estabilización química y consolidación de los soportes. Se han efectuado montajes de protección individual y se han agrupado en cajas-estuche, como medida de clasificación, según el color correspondiente a cada hoja de álbum. Estos montajes, confeccionados con material neutro, se integran perfectamente en el sistema de almacenamiento existente en el Museo, y los protege frente a deterioros físicos y ambientales.
Para culminar el proceso se ha apostado por la digitalización como medida fundamental para preservar su materialidad. De esta forma se facilita la labor de investigación, además de cumplir con el objetivo de brindar el acceso al conocimiento de este patrimonio identificativo de la provincia de Segovia.
Muestra de sus grandes trabajos
Dentro de las obras seleccionadas para su conservación se encuentran algunos de los grandes trabajos de Daniel Zuloaga. Uno de los más destacados es el que realizó para el Palacio de Ocharan. Para este edificio, que se encuentra en Castro-Urdiales, el ceramista se encargó de realizar los azulejos esmaltados que adornan la fachada.
De igual forma, se aprecian dibujos de propuestas en Barcelona, un lugar en el que Zuloaga tuvo una gran acogida. Esto se debe a que ceramistas de la Ciudad Condal, como Venancio Vallmitjana, estaban entusiasmados con su obra y esto le permitió que la sociedad catalana apostase por su trabajo, ya que rompía con el modernismo de Gaudí y otros contemporáneos a los que estaban acostumbrados.