La geometría variable, ese concepto tan utilizado en los últimos tiempos en la política española desde las filas del PSOE para gobernar con muletas cuando los escaños no dan para hacerlo en mayoría, empieza a ser un término que PP y Vox contemplan con simpatía de cara al complejo horizontes de 2027, cuando se celebren las próximas elecciones generales.
¿El motivo? Los números ya les salen para desalojar del Parlamento a la mayoría Frankenstein que ha orquestado Pedro Sánchez, llevando esa geometría variable hasta sus límites al ser capaz de pactar con la derecha catalana que representa Junts y al mismo tiempo con la izquierda abertzale que ejemplifica Bildu.
Ahora, una encuesta difundida ayer por un medio nacional pone de manifiesto que el bloque de PP y Vox gana músculo hasta llegar a sumar entre ambos 190 diputados (la mayoría absoluta está en 176 escaños), pero ese mismo sondeo revela que el PSOE ha logrado rentabilizar el pulso que mantuvo con el decreto ómnibus y la revalorización de las pensiones, dado que Sánchez gana cinco décimas en intención de voto respecto a enero mientras el PP se dejaría siete.
La encuesta advierte que si hoy hubiera elecciones generales adelantadas, el PSOE obtendría 118 diputados, cinco más que hace tan sólo un mes con una subida de cinco décimas en intención de voto, mientras que el de Alberto Núñez Feijóo lograría 148 escaños, cuatro menos de los que le adjudicaba en su entrega de enero el barómetro elaborado por Sigma Dos y un retroceso en su apoyo de siete décimas.
Vox continúa creciendo coincidiendo con la vuelta de Donald Trump a la Presidencia de EEUU, y se situaría en unos 42 escaños, frente a los 33 que tiene actualmente.
Además, el derrumbe del espacio a la izquierda del PSOE no permitiría una reedición de la actual coalición. Sumar, el conglomerado que lidera una menguante Yolanda Díaz, lograría nueve escaños, 22 menos que en la última cita electoral y Podemos sacaría tres diputados.
A la vista de todos estos datos, el vicesecretario de Coordinación Autonómica del PP, Elías Bendodo, quiso responder ayer al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que se preguntaba dónde estaba el PP, y señaló que la formación popular «está hoy cinco o seis puntos por encima del PSOE en todas las encuestas y con previsiones de ganar y gobernar desde las próximas elecciones».
Bendodo también expresó su temor a que lo que ha llevado a la vicepresidenta del Gobierno, María Jesús Montero, a Andalucía es «el barro, el fango, la crispación, la pelea y el enfado permanente».