Tras más de tres décadas de rock y conciertos a sus espaldas, la banda segoviana Lujuria sigue sorprendiendo a sus seguidores con originales puestas en escena en sus actuaciones. El último ejemplo tuvo lugar este fin de semana  en la localidad zamorana de Morales del Vino, donde Lujuria fue uno de los grupos participantes en el festival Motorrock Classic, una de las citas obligadas del heavy metal en el verano, en el que compartieron cartel con bandas legendarias como Obús.

El inicio del concierto tuvo una original puesta en escena, ya que el cantante del grupo Óscar Sancho eligió para llegar al escenario un coche fúnebre, en el que ocupó el lugar destinado al féretro. El peculiar cortejo fúnebre se abría con un abanderado que ondeaba la enseña del grupo, que llegó a los pies del escenario con la ambientación musical de una particular y rockera marcha fúnebre.

Sancho bajó del vehículo aplaudido por sus seguidores, y tomaba el estandarte para subir al escenario gritando la frase : "¡¡vamos a resucitar el heavy metal!!", y comenzar su actuación, una de las más esperadas del festival.

En sus redes sociales, Óscar Sancho aseguraba que con esta particular "perfomance" hizo realidad uno de sus sueños: "empezar un bolo en funeraria", y señala que su entrada "ha sido la más épica en 35 años de carrera". "¿Se puede ser más heavy? Pues sí. Qué el chófer se llame Judas", aseguraba con humor.