El obispo de Segovia César Franco, continúa esperando la decisión de los estamentos eclesiales sobre su relevo al frente de la diócesis, nueve meses después de que presentara la renuncia a su cargo al cumplir 75 años, edad en la que el Derecho Canónico establece la jubilación de presbíteros y obispos.

En la presentación de la nueva página web de la diócesis, monseñor Franco señaló que la decisión depende tanto de la nunciatura apostólica del Vaticano en España como del Dicasterio de Obispos en Roma, y aseguró que durante los meses de verano "todos los dicasterios cierran y Roma es un desierto".

Así, señaló que la actividad en estos estamentos vuelve a la normalidad en septiembre, por lo que aventuró que esta decisión "podría tomarse a partir de octubre"; teniendo en cuenta que la diócesis de Segovia no es la única en España en esperar un nuevo obispo, ya que en diócesis como Mallorca, Barcelona, Seo de Urgell, Lleida o Cuenca se vive una situación similar.

Pese a ello, señaló que la actividad pastoral continúa con normalidad y en breve se presentará la programación para el nuevo curso, y aseguró que está trabajando conforme a la frase de San Agustín; "Lo que esté de tu parte, haz lo que puedas, y lo que no esté de tu parte, confía en Dios".