El vicepresidente de la Junta y líder de Vox en Castilla y León, Juan García-Gallardo, acusó hoy al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, de ser "una marioneta en manos de los burócratas de Bruselas", así como un dirigente "incapaz de defender a los agricultores, ganaderos e industria de España por su sumisión a las agendas globalistas".
Según informan desde su equipo, García-Gallardo hizo estas declaraciones en Budapest, en el marco de una mesa redonda celebrada en el Mathias Corvinus Collegium (MCC), la institución educativa privada más importante de Hungría. El encuentro estuvo moderado por el director de Estudios Europeos del MCC, Rodrigo Ballester, y, además del vicepresidente de la Junta, participaron el director general del Mathias Corvinus Collegium, Zoltan Szalai, e István Kovács, del Centro por los Derechos Fundamentales.
Asimismo, lamentó que la "agenda globalista" y la ideología "woke", vinculada a la izquierda, tengan tanto peso en Europa y criticó que ese "sesgo ideológico lleva a amenazar y penalizar a países como Hungría o Polonia", porque a su juicio no comparten esas políticas y las combaten. Por contra, indicó, no se interviene contra gobiernos como el español, que aseguró promueve una ley de amnistía "inmoral, injusta e inaceptable" y que a su juicio "respalda los planes de la agenda globalista y de la ideología de género".
"Con los últimos movimientos contra Hungría podemos ver que los globalistas, las élites de Bruselas, están muy nerviosos. Y lo están porque ven que la sociedad ya no les cree como antes, porque las personas están empezando a abrir los ojos y ya no se creen sus fórmulas fallidas", sentenció García-Gallardo.
Igualmente, el vicepresidente de Castilla y León defendió en Budapest que los conservadores europeos deben colocar al sector primario y a los trabajadores en el centro de sus preocupaciones políticas. "Debemos sellar una alianza firme con el campo y con los trabajadores abandonados por los sindicatos de clase; unos sindicatos que prefieren defender el 'wokismo' antes que sus derechos", dijo.
De esta forma, la alianza con los agricultores y ganaderos de Europa debe ser, a juicio de García-Gallardo, "frente a las políticas verdes que están destruyendo nuestro sector primario". El vicepresidente de la Junta ya había expresado en otras ocasiones su convicción de que los "excesos" de las políticas ecologistas perjudican "gravemente" a agricultores y ganaderos, asunto en el que insistirá mañana jueves en el plenario del Comité de las Regiones de Europa, en Bruselas, en el que participará.
"Las alianzas con el campo y con los trabajadores son las alianzas que nos van a hacer fuertes a los conservadores", aseguró García-Gallardo. "Tenemos que confiar en nosotros y en que tenemos buenas ideas: las ideas del sentido común, las ideas en contra de la cultura woke. Si hacemos esto, si nos mantenemos firmes, la verdad y el sentido común prevalecerán, y podremos conseguir un gran resultado en las elecciones de junio. Un resultado que pueda cambiar el futuro de Europa", expresó.
Los asistentes a la mesa redonda del Mathias Corvinus Collegium mostraron también interés en conocer más detalles de la situación de deterioro democrático que se vive en España. Al respecto, García-Gallardo explicó que "el hombre con más poder hoy en España es Carles Puigdemont, un hombre perseguido por apropiación indebida y por capitanear un golpe institucional contra la unidad de España". "Tenemos a criminales decidiendo leyes en España, leyes que les benefician", subrayó el vicepresidente de Castilla y León. "Y a un Gobierno que está dispuesto a amnistiar el terrorismo callejero en Cataluña, así como las agresiones que sufrieron las fuerzas del orden".
Otras actividades
El vicepresidente de Castilla y León también se entrevistó ayer con el ministro de Cultura e Innovación, János Csák, con quien trató sobre la posible colaboración en proyectos culturales conjuntos. Ambos acordaron que responsables del Ministerio y de la Consejería de Cultura contactarán próximamente concretar este interés común por colaborar.
Csák, que tiene una trayectoria profesional ligada al mundo empresarial (en especial a las telecomunicaciones, la banca y la energía), compartió con el mandatario castellano y leonés su reforma de la Universidad en Hungría, donde ha introducido criterios de calidad, así como incentivos para propiciar un mayor rendimiento académico.
En otros encuentros, García-Gallardo pudo intercambiar opiniones sobre otras preocupaciones comunes a Hungría y España, como la protección de las fronteras nacionales, el envejecimiento poblacional y los problemas de natalidad de las sociedades europeas.