La tasa de emancipación de los jóvenes de entre 16 y 29 años de Castilla y León bajó una décima en el segundo semestre de 2023 respecto al dato del año anterior y se situó en el 15,8 por ciento, mientra que subió en el conjunto de España hasta el 17 por ciento. Así aparece recogido en el Observatorio de Emancipación publicado hoy por el Consejo de la Juventud de España, donde se precisa que las tasas más elevadas de emancipación del colectivo se registran en Cataluña, 20,6 por ciento; y Canarias, 20 por ciento; y las más bajas en Extremadura, 13,6 por ciento; y Cantabria, 13,9 por ciento.
El documento recogido por Ical, constata además que la tasa de temporalidad era más alta entre la población joven de Castilla y León que entre la del total del Estado, ya que casi cuatro de cada diez personas jóvenes castellanas y leonesas que trabajaban lo hacían con un contrato temporal. Además, el informe pone de relieve que Castilla y León fue una de las pocas comunidades autónomas en las que creció el paro.
Con todo, del lado positivo, Castilla y León era una de las comunidades autónomas en las que era más rentable vivir en solitario alquilando una vivienda, aunque la renta mensual fuera de más del 60 por ciento del salario mediano de una persona joven castellana y leonesa. En este sentido, en cuatro autonomías (Canarias, Cataluña, Madrid y Baleares), el importe del alquiler ya eera superior al 100 por ciento del salario de un persona joven.
España
El estudio semestral constata para el conjunto nacional, que la tasa de emancipación sigue la "buena tendencia" en el segundo semestre de 2023 situándose en el 17 por ciento. Así, la tasa de emancipación se seguía recuperando con respecto a la enorme bajada que se produjo durante la crisis de la COVID-19. Aun así, seguía 1,6 puntos debajo de la cifra alcanzada antes de la pandemia por coronavirus y 8,9 puntos por debajo de la que había antes de que estallara la Gran Recesión de 2008. Además, siete de cada diez personas jóvenes que trabajaban en España (70,4 por ciento) seguían viviendo en la vivienda familiar. Esto significaba que ni aun teniendo un sueldo, podían acceder a una vivienda.
Durante el segundo semestre de 2023 se observaba un incremento en la edad media de emancipación, que se situó en los 30,4 años, mientras que en Europa la edad media era de 26,3 años. Además, la tasa de emancipación en España era 14,9 puntos más baja que la europea.
El precio de las viviendas en alquiler era el más alto de la historia: la mediana para un piso estándar se situaba en 968 euros al mes, 88 euros más que un año antes o, lo que es lo mismo, un diez por ciento más. De esta forma, el precio de los alquileres subía 2,5 veces más que los salarios de las personas jóvenes. El precio de los suministros subió incluso más, un 17,3 por ciento, situándose en 163,61 euros al mes.
Así, si el salario mediano de una persona joven era en el cuarto trimestre de 2023 de 1.050,77 euros netos en 12 pagas, ni siquiera con todo su sueldo podría permitirse alquilar una vivienda en solitario. Además, la tasa de riesgo de pobreza subió un punto con respecto a 2022, afectando a tres de cada diez personas jóvenes en España. El 22,8 por ciento de las personas jóvenes trabajadoras también se encontraban en riesgo de pobreza.
En palabras de Andrea Henry, presidenta del CJE: "La subida en la tasa de emancipación del segundo semestre de 2023 es positiva para la juventud española. Sin embargo, que una persona joven viva fuera del domicilio familiar no siempre significa que tenga unas buenas condiciones. Es responsabilidad de las administraciones públicas dar una solución a la situación precaria de las personas jóvenes que nos vemos obligadas a salir de casa sobre endeudándonos."