David Matarranz

Segovia Pasión

David Matarranz


Luces largas

09/04/2025

Esta semana tuve la suerte de asistir a la conversación pública entre líder sindical de UGT ya retirado, Cándido Méndez,  y el profesor universitario y economista José Carlos Diez. La charla fue en el curso del Congreso de Empresas más Finanzas que cada año organiza con gran éxito la obra social de Caja Viva Caja Rural. Si a alguien le interesa lo puede volver a ver en el canal de  YouTube de La8 Segovia, que lo emitió en directo.

La verdad es que lo disfruté mucho. Cuando escuchas a personas que saben mucho de un tema, como es la economía y el trabajo, y además aportan ideas de una manera tranquila y sin inquina, se agradece. En tiempos de Tik Tok y reels de Instagram, donde todo tiene que durar treinta segundos, y donde el mensaje hay que clavarlo en un titular, comienza a ser un lujo escuchar con calma una conversación. Y no necesariamente tienes que estar de acuerdo en sus postulados y argumentos.

Los que nos dedicamos a la cosa comercial y del marketing, sabemos lo importante que es escuchar. Puedes hablar y tratar de persuadir con argumentos, pero primero tienes que escuchar de modo atento para saber a quién tienes enfrente, que piensa, y fundamentalmente que necesita. Al final de todo podrás convencer o vender, pero sin conocer y escuchar, todo es mucho más difícil.

Ahora los discursos políticos tratan de convencer con frases cortas que entren en la pieza del telediario de turno, o que sirvan para los gestores de contenido de las redes sociales del partido o la institución de turno. Todo en píldoras y fácil de entender para el gran público. Lo sueltas y la semana que viene se olvida. Esta semana toca este tema y la siguiente se olvida para tocar otro, en el que tienes que posicionar rápidamente.

La otra opción de comunicación política es el meme. Tengo en mi libreta de contactos algún político de la ultraderecha local que cuando repaso los estados del Whatapps te clava un meme con lo más granado de su argumentario rancio, racista y casposo.

Estoy deseando de ver el meme para entender la posición de estos patriotas tan amigos de Donald Trump, ahora que el yanqui ataca a la economía europea, incluida la española. Los que hace un año se subían al tractor con la bandera de España para defender a nuestro sector primario; ahora se hacen los locos con la política arancelaria de su ídolo norteamericano que tanto va a perjudicar a todos los ganaderos, agricultores y al potente sector agroalimentario que tanto empleo y riqueza deja en nuestros pueblos.

A ese sector de nostálgicos que a la que te descuidas te sueltan el "… con Franco se vivía mejor" tampoco salieron bien parados de esa charla. El economista José Carlos Diez trazaba como era la economía española en 1976 tras cuarenta años de régimen dictatorial, y la verdad es que el cambio después de medio siglo ha sido abismal, y para mucho mejor.

Hoy contamos en España con empresas modernas, internacionalizadas y con sectores económicos pujantes. Una sociedad con niveles de cobertura social importante. Con tasas de educación y formación o infraestructuras que entonces ni se soñaban o parecían impensables. No estamos exentos de problemas y cuestiones que mejorar y afrontar. Retos que superar en un mundo global y tan complicado como el que se está preparando en los últimos meses.

Por eso no se entiende ese ambiente cenizo que a veces se percibe en el ambiente y esa polarización de la sociedad. Un enfrentamiento a veces alimentado por los medios de comunicación y las redes sociales que tratan de colocar ciertos mensajes para ocultar una realidad más positiva. Así cuando en las encuestas de opinión preguntan cómo es la situación general, la respuesta mayoritaria es que es mala; cuando preguntan por la personal, la que se impone es buena o muy buena.

Por eso es bueno poner luces largas para valorar el camino recorrido y todo lo conseguido por los españoles en el periodo democrático, que ha sido de lejos el mejor de nuestra historia, aunque siempre hay problemas y cosas que mejorar. Y replicar a esos nostálgicos que tratan de salir ahora aprovechando que el tiempo difumina la memoria y que muchos jóvenes no están por la labor de profundizar demasiado. Por muchos embalses que se construyeran en aquellos años de vida en blanco y negro.

Luces largas para pensar en positivo y afrontar los problemas y sus posibles soluciones con visión estratégica. Es decir a medio y largo plazo, con resultados que llegarán años o décadas después…. Aunque ya no estén los políticos que lo promovieron para recoger las glorias y los réditos electorales. A lo mejor pedir demasiado en una sociedad llena de prisas e impaciencia.