Marcelo Galindo.

Pare, mire, cruce

Marcelo Galindo.


Pagola, la casa sin barrer

15/02/2025

En septiembre de 2024, la fotografía enviada por el departamento de comunicación del ayuntamiento mostraba la imagen de un sonriente alcalde José Mazarías junto a los familiares del Silvestre Manuel Pagola en la reunión que mantuvieron para trasladar el apoyo del Ayuntamiento de Segovia a la declaración de Hijo Adoptivo de la ciudad en favor del arquitecto que en el primer tercio del siglo XX cambió la fisonomía de la ciudad. En el último párrafo de la nota informativa que se remitía a los medios de comunicación tras el encuentro, se subrayaba que (sic) "su trabajo y su estilo son visibles en varios puntos y edificios de la ciudad. Llevan la firma de este arquitecto la que fuera vivienda del empresario Nicomedes García, y sede de su fundación, el inmueble situado en la plaza de la Rubia, esquina a calles Serafín y Colón, o la ampliación de la que fue Clínica Gila, en la calle San Francisco. Pagola fue también autor del Plan de Mejoras Urbanas de Segovia y está considerado uno de los arquitectos más importantes de su época".

Con este apoyo, el Ayuntamiento se hacía eco de la petición de la familia Pagola, apoyada por la Real Academia de Historia y Arte de San Quirce y por los colegios oficiales de arquitectos de Segovia, Madrid, Vasco-Navarro y la Asociación de Amigos del Patrimonio de Segovia, y todo apuntaba a que la tramitación del expediente llevaría a la ciudad a contar con su decimoséptimo hijo adoptivo.

Pero la política hace extraños giros que convierten en blanco lo negro y viceversa, y el equipo de Gobierno decidió hace un par de semanas dar un paso atrás en esta intención al no contar con el apoyo de la oposición para esta iniciativa, lo que devuelve esta petición a la casilla de salida y obliga a buscar otras fórmulas de reconocimiento más acordes con el sentir general de los grupos políticos municipales.

¿Es Pagola merecedor de ser hijo adoptivo de Segovia?. Pocas dudas puede haber sobre la respuesta afirmativa a esta pregunta al repasar la biografía y los testimonios que se conocen sobre la vida y la obra de un bilbaíno que fraguó en Segovia lo más importante de su singladura profesional, cuyo trabajo dejó una huella más o menos indeleble (si no contamos el derribo de Villa Estrella) en la ciudad que hizo un poco más vivible.

Los merecimientos de Pagola no parecen haber calado hondo en los responsables municipales, fruto de la falta de entendimiento del que hacen gala los grupos políticos a lo largo de el ya mediado periodo de Gobierno encabezado por el Partido Popular. Los Populares no han sido capaces de buscar el apoyo necesario para llevar adelante esta iniciativa y trataron de llevar adelante el expediente sin contar con un mínimo consenso que hubiera pasado por recabar su apoyo a través de los órganos pertinentes. Por parte de la oposición, el hecho de que la decisión del equipo de gobierno sobre este asunto se iniciara 'manu militari' ha sido suficiente para mostrar su desacuerdo ante esta medida y optaran por su abstención a la hora de incluir el dictámen en el último pleno sin tener en cuenta la figura y los méritos de Pagola, lo que obligó a su retirada al no contar con el apoyo necesario

Donde si parece haber un acuerdo tácito y no expresado es en señalar que la declaración de Hijo Adoptivo puede resultar "excesiva" y abogar por otra fórmula de reconocimiento como dar nombre a algún entorno urbano vinculado a su obra e instalar una placa conmemorativa, que – según parece- es más acorde a los méritos del arquitecto.

Para rebatir este endeble argumento, baste un detalle. En los últimos 75 años, sólo 16 personas han sido distinguidas con el título de Hijo Adoptivo de la ciudad, lo que estadísticamente supone que Segovia ha otorgado esta distinción una vez cada casi cinco años; por lo que no parece una cadencia que invite a pensar que es un título del que la ciudad abusa o que concede de forma arbitraria.

La ciudad ha demostrado en un gran número de ocasiones ser generosa y agradecida con quienes han trabajado por engrandecer su nombre o hacerla más habitable, y el arquitecto Pagola es sin lugar a dudas un gran ejemplo… pero en Segovia, "los unos por los otros, la casa sin barrer".